El ahorro neto de los municipios está cerca de ser negativo por primera vez en Gipuzkoa

Donostia. El ahorro neto del conjunto de los ayuntamientos de Gipuzkoa está cerca de pasar a valores negativos por vez primera en la historia del territorio a causa de una crisis económica que está afectando seriamente a unas cuentas municipales que hasta hace tres años gozaban de una muy buena salud. Los responsables del departamento foral de Hacienda y Finanzas alertaron ayer de esta situación anómala que viven un tercio de los ayuntamientos. En ellos, la diferencia entre ingresos corrientes y gastos corrientes no financieros arroja un saldo negativo, algo que limita su capacidad de endeudamiento futuro.

En un encuentro con los medios en Donostia, el diputado foral del ramo, Pello González, calificó de "preocupante" la evolución futura del ahorro neto de los ayuntamientos guipuzcoanos después de la "brusca caída" experimentada por este indicador financiero municipal en los ejercicios 2008 y 2009. Y es que las cifras de Hacienda reflejan que el ahorro neto del conjunto de los consistorios del territorio "prácticamente ha desaparecido", situándose hace un año en 20 millones de euros, cuando en 2007 esa cifra era de 142 millones, lo que supone una disminución del 86%.

González -que compareció junto a la directora de Finanzas y Presupuestos, Leire Ereño, y el director de Política Fiscal, Aitor Orena- recordó que el ahorro neto de los municipios se ha mantenido siempre alrededor de los 100 millones de euros, situación que ahora ha cambiado radicalmente a raíz de la crisis económica. Precisamente esta crisis ha hecho que los ingresos de la Hacienda guipuzcoana se hayan reducido considerablemente, lo que ha motivado que en los dos ejercicios precedentes los ayuntamientos se hayan visto obligados a devolver en conjunto más de 100 millones de euros al Fondo Foral de Financiación Municipal, que cada año les transfiere la Diputación y que supone su principal fuente de ingresos.

Como consecuencia de todo ello, en 2008 un total de 11 ayuntamientos registraron un ahorro neto negativo, cantidad que un año más tarde se amplió a 29 consistorios. Preguntado por la evolución de este indicador en 2010, González señaló que "no tenemos todavía los datos porque los municipios no los han transmitido aún pero las cifras serán similares a las de 2009".

"No tan preocupante" El diputado foral afirmó que el caso de Pasaia, con ciertas irregularidades en la gestión de sus créditos, no ha sucedido en ningún otro municipio, si bien apuntó que hay localidades como Andoain que atraviesan "una situación estructural preocupante, con ahorros negativos en los últimos años". González se excusó de citar más localidades que atraviesan una mala situación y se limitó a ofrecer un retrato del conjunto de municipios, afirmando que pese a la "drástica bajada" de ingresos causada por la crisis, "la situación general no es tan preocupante y gozan de buena salud financiera". Aun así, aconsejó a los responsables de los ayuntamientos a que realicen un "plan ad hoc a cuatro años" para mejorar los indicadores de las finanzas municipales. Ese plan será obligatorio, tal como exige la tutela de la Diputación, en los casos de desequilibrios financieros.

González concluyó que, siempre y cuando los municipios adopten las medidas adecuadas, se mantendrá el nivel global de deuda viva -que cerrará este año en 483 millones de euros, un 4% más que el ejercicio 2009-; las cargas financieras seguirán estables, con un ahorro neto sin signos de recuperación; y los remanentes de tesorería continuarán en algunos ayuntamientos en negativo, aunque con visos de mejora.