Si necesitas gafas o lentillas para tus actividades cotidianas estás de suerte ya que en un futuro no muy lejano podrían salirte gratis. En España siete de cada diez personas utiliza uno o ambos complementos visuales, según el Libro Blanco de la Visión 2023.

La ministra de Sanidad, Mónica García, ha anunciado en el Congreso de los Diputados la incorporación de las gafas y las lentillas a la lista de las prestaciones de la Seguridad Social. Una nueva medida de la que Sanidad no ha dado más detalles pero que podría beneficiar a cientos de miles de ciudadanos que necesitan de estos instrumentos para una correcta visión.

Es una idea lanzada sin un plan concreto de implementación ni un presupuesto concreto para llevarlo a cabo (al menos no se ha hecho público). Tampoco hay una fecha concreta para la entrada en vigor de esta nueva normativa, ya que se irá concretando “a lo largo de la legislatura”.

Aún se desconoce las cuantías o porcentajes de las ayudas y los sectores de la población a los que beneficiaría, y la ministra destaca que la intención es que “la gente no tenga que echar mano al bolsillo cuando necesite una prestación”.

Según lo avanzado por Sanidad tendría un funcionamiento similar al que se ha implantado para la salud bucodental

y su puesta en práctica implicaría también al Ministerio de Derechos Sociales y Consumo.

Esta medida está implantada con éxito en algunos países de Europa como en Francia, donde se pueden conseguir gafas gratis, además permite la posibilidad de que los mayores de 16 años las renueven de forma gratuita cada dos años, hasta un límite de precio.

En el Reino Unido el Gobierno ofrece bonos a ciertos colectivos como menores de 16 años o personas con bajos ingresos.

En Alemania el Ejecutivo rembolsa el costo de las gafas para menores de 18 años y para los mayores con discapacidad visual grave.

En el trabajo

En otro ámbito, en el laboral, el uso de las gafas o lentillas cada vez es mayor entre las personas que las utilizan de manera habitual como herramientas de trabajo los dispositivos tecnológicos con pantallas como ordenadores, portátiles, tabletas o móviles.

El coste de las gafas suele correr por cuenta del empleado, aunque bien es cierto que cada vez hay más empresas, sobre todos en el sector de las telecomunicaciones y las tecnologías de la información (o en los departamentos específicos de otras empresas de diversos sectores) que abonan cada cierto tiempo a sus trabajadores que lo necesiten la factura de las gafas o lentillas.

Normalmente este desembolso suele estar recogido en los convenios particulares de esas empresas, en general multinacionales o grandes firmas de diversos sectores económicos.

Ahora la justicia europea ha sentenciado que la empresa deberá asumir el coste de las gafas graduadas o de las lentillas de aquellos empleados que trabajen frente a una pantalla de ordenador y que las necesiten para corregir su agudeza visual.

Así lo dictaminó la Sala Segunda del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) en una sentencia de 2022 en la que dio respuesta a una cuestión prejudicial planteada por un juzgado rumano cuyo fallo ratifica las conclusiones presentadas por una abogada general del tribunal de Luxemburgo en julio del año pasado. La resolución indica que los empresarios están obligados a proporcionar a los empleados con problemas de visión un "dispositivo corrector especial", es decir, gafas graduadas o lentes de contacto.

No está aún claro cómo y cuando se va aplicar esta norma en España. Expertos en materia laboral señalan que el empleado deberá plantear la petición a la empresa. Esta medida podría ser objeto de litigios laborales y también de negociaciones entre los comités de empresa y la dirección hasta alcanzar algún acuerdo.