El centro comercial Garbera de Donostia está de estreno esta semana: la cadena de hamburgueserías Vicio, que fundó el ganador de Masterchef 7, Aleix Puig, y cuenta con Antoine Griezmann y Leo Messi entre sus inversores, abrirá este jueves su primer local en la capital guipuzcoana.
La marca se lanzó en plena pandemia, aprovechando el auge del delivery, y logró destacar rápidamente en el sector gracias a sus hamburguesas gourmet, un branding innovador y una estrategia centrada en la calidad del producto y la experiencia del cliente. Son muchos los famosos que se han visto relacionados con la marca.
Entre ellos, Will Smith, que recibió unos guantes de boxeo de la marca, haciendo así que la marca resonase en todo el mundo. Desde entonces, Vicio se ha convertido en un referente en la gastronomía de hamburguesas en todo el Estado.
La cadena de hamburgueserías Vicio esperaba cerrar 2024 con una facturación de 55 millones de euros, cifra que supone un 30% más, según informó la compañía en un comunicado.
En cuanto a los locales, la compañía finalizó el pasado año impulsando su presencia con un total de 30 establecimientos, de los cuales seis son restaurantes físicos, mientras que cuenta con una plantilla de 800 empleados. En el caso de Donostia, la plantilla está compuesta por alrededor de 20 personas.
"Alejado" de la hamburguesa gourmet
Vicio, explica la cadena en su página web, es el “restaurante digital nacido en Barcelona en el inicio de la pandemia y que ha logrado un crecimiento del 900% y una facturación de casi 4 millones de euros en su primer año”.
Nacido de la mano del ganador de Masterchef 7, Aleix Puig, y su socio, Oriol de Pablo, la empresa busca “basarse en la calidad. Bajo esta premisa, han creado una marca real y con mucha personalidad, que va más allá de un restaurante y que constituye toda una experiencia, desde que pides hasta que terminas de comer”.
En una era en la que se imponen las denominadas hamburguesas gourmet, que querían desterrar la idea que asociaba este producto a la denostada comida rápida, Vicio busca alejarse también de la tendencia gourmet y “se define como algo cool, que encaja y se siente cómodo en los contrastes, tanto en la calle como en una fiesta de gala: trashy pero elegante”.