Donostia ha alcanzado por primera vez la cifra de 193.093 habitantes gracias a las personas inmigrantes llegadas a la ciudad y siguiendo la tónica del año anterior. En total, hay 19.316 personas extranjeras censadas en la capital guipuzcoana, lo que supone un 10,2% del total, una cifra que ha aumentado respecto al pasado, cuando era del 9,75%.
Así lo ha señalado este martes el alcalde, Eneko Goia, que ha dado a conocer los datos del padrón donostiarra a fecha del 31 de diciembre pasado, con 380 personas más que en ejercicio de 2022.
Además, en Donostia hay más personas de origen extranjero que las citadas, ya que algunas han obtenido la nacionalidad española. El total de personas nacidas fuera del Estado español asciende a 28.139, es decir, el 14,5% del total. "Somos más plurales y compartimos más culturas", ha señalado Goia. "Si no vinieran extranjeros perderíamos población claramente". añadió.
El mandatario donostiarra ha destacado que sin la llegada de personas de otros países, el nivel de envejecimiento, que se encuentra también en récords históricos, sería aún mayor ya que la ciudad perdería del orden de un millar de personas al año.
Honduras en cabeza
La población extranjera creció en 1.080 personas respecto al año anterior, es decir, un 5,9%, y Honduras (con 2.514 personas), Nicaragua (1.975) y Colombia (1.761) son los tres países con mayor representación en la capital guipuzcoana, seguidos de Marruecos (1.346) e Italia (1.047). Estas cinco nacionalidades copan el 44,7% de la población extranjera en Donostia.
En el año 2022, el tercer puesto que había sido ocupado por Marruecos en ejercicios anteriores quedó asignado a Colombia, que desplazó al país magrebí. Italia, por su parte, fortaleció su posición también.
Entre locales y originarios de otros países, la tasa de natalidad se ha incrementado mínimamente y ha pasado del 5,58 nacimientos por cada mil habitantes en 2022 a 5,69 en 2023. Igeldo fue el barrio con un índice más alto (9), seguido de Añorga (7,6) mientras que Martutene tuvo el más bajo, con 2,2.
Estos datos conllevan un envejecimiento que también se sitúa en cifras récord y alcanza el 210,5, es decir, que esta es la proporción de mayores de 65 por cada menor de 15 años. Este índice subió 6,8 puntos respecto al año anterior.
El crecimiento vegetativo fue en 2023 negativo, con 2.020 defunciones y 1.079 nacimientos, es decir, 941 personas menos, que fueron compensadas por la llegada de ciudadanos de otros países.
116 centenarios en Donostia
En la actualidad, el envejecimiento se plasma también en que el 25,7% de los vecinos de Donostia son mayores de 65 años, el 7,8% tiene más de 80, y hay 116 personas que superan los 100 años, a fecha de final de diciembre. Entre ellos, una de 112 años.
Los datos del padrón reflejan también que la edad media de la ciudadanía donostiarra es de 47 años, aunque entre las mujeres es de 48 y entre los hombres, de 45.
El barrio de Gros es de mayor edad media, con 50 años, seguido del Centro (49) y El Antiguo (49). Los barrios más jóvenes, por su parte, son Loiola y Aiete, ambos de 43 años de media. En ambos casos son zonas en las que se han creado nuevas promociones de vivienda.
Como es habitual, las mujeres siguen siendo más numerosas que los hombres y representan el 52,7% de la población, además de ser más longevas. Entre los mayores de 65 años son un 58,7% y entre los mayores de 80, el 66,4%.
Amara Berri, el barrio más poblado
Por otra parte, los datos del padrón revelan también cuáles son las zonas más pobladas. En este caso, no se han producido cambios respecto a años anteriores ya que Amara Berri, con 30.192 habitantes, sigue siendo el barrio más populoso, y copa el 16% de la población de la capital guipuzcoana. Le sigue El Centro, con 22.264 habitantes, y Altza, con 20.484. Los tres, junto con Gros (17.943 habitantes) concentran casi la mitad de toda la población: el 48%. La zona menos poblada es Zubieta, con 314 habitantes en su parte donostiarra.
Aiete, el que más crece
Los datos reflejan también los barrios que han crecido más. Aiete ha recibido 186 nuevos vecinos, seguido de Intxaurrondo (174), Altza (142), el Centro (123) y Añorga (117).
Al contrario, los barrios que más habitantes han perdido son Amara Berri que, a pesar de seguir siendo el más poblado, perdió 283 el pasado año; Gros, con 126 vecinos menos; El Antiguo (30); Ategorrieta-Ulia (28), Ibaeta (20), Miramón-Zorroaga (16) y Miracruz-Bidebieta (20).
El alcalde manifestó que se produce una coincidencia entre los barrios más envejecidos y los que mayor pérdida de población sufren "con la excepción del Centro". La inclusión del nuevo barrio de San Bartolomé en este ámbito, así como el mayor tamaño de los pisos, que permite hace divisiones, son factores que, a juicio del alcalde, justifican esta excepción.
