El Ayuntamiento de Donostia prevé establecer una regulación especial para el acceso de los vehículos franceses a la futura Zona de Bajas Emisiones (ZBE), que se pondrá en marcha a fin de año.
Según el documento que está en exposición pública hasta el 12 de marzo, para la presentación de alegaciones y propuestas, el hecho de que la gran mayoría de coches extranjeros que llega a Donostia como turistas y excursionistas proceda del país vecino hace aconsejable una especial regulación porque “tienen un sistema de etiquetado ambiental diferente o no disponen de distintivos de ese tipo”.
Como se recordará, en una primera fase, hasta 2027, no podrán acceder a la ZBE los vehículos que carezcan de etiqueta ambiental, aunque se autorizará el acceso a los residentes, gremios que necesitan entrar a la zona, personas con movilidad reducida y otros colectivos. Se calcula que el 10% de la actual flota de Donostia tendrá vetado el acceso a la ZBE en el primer periodo.
A partir de 2028, se pondrá en marcha una segunda fase, en la que los vehículos con etiqueta ambiental “B”, excepto los autorizados, también se quedarán fuera.
La decisión municipal de elaborar una regulación específica para los vehículos matriculados en Francia, aún sin concretar, obedece al peso que tienen dentro del conjunto de coches extranjeros, también significativos en número en la zona Centro de la ciudad, que se convertirá en ZBE. La Parte Vieja, el Centro, Amara Zaharra y San Roque hasta la plaza del Centenario es el espacio de la futura zona delimitada.
En temporada baja, el Ayuntamiento calcula que entran cada día 885 vehículos extranjeros a la zona que estará regulada como ZBE. En temporada alta son más del doble: 1.821.
Si se quiere calcular los viajes totales, hay que duplicar las cifras ya que a la entrada se suman las salidas. Es decir, 1.770 en temporada baja y 3.642 en alta.
Alojamientos
La afluencia de vehículos extranjeros por el corazón de Donostia es un aspecto que el Ayuntamiento buscar contener, aunque gran parte de los alojamientos y los aparcamientos subterráneos se encuentran en la zona.
Según el documento que está en fase de análisis, la zona Centro de la ciudad coincidente con la ZBE acoge seis parkings públicos subterráneos con 2.705 plazas de rotación, lo que la convierte en la zona de la ciudad que más aparcamientos y plazas de estacionamiento público. Le sigue Gros, con tres parkings; Amara Berri y Egia, con dos en cada uno, y el barrio de El Antiguo alberga, con uno.
El número de alojamientos para visitantes es el otro factor que atrae coches al corazón de Donostia. De las 18.900 plazas para turistas que hay en la capital guipuzcoana, 5.666 están dentro de la ZBE.
En los meses con mayor ocupación de las plazas hoteleras (88% de media), la entrada de turistas alojados en la ZBE equivaldría a unas 4.986 pernoctaciones al día. En temporada baja, con un 42,7% de ocupación, en la ZBE habría unas 2.420 pernoctaciones.
En 2022, el 68% de los turistas fueron extranjeros en los meses de máxima ocupación, un índice que bajó a 41% en temporada baja. “Por ello –señala el documento– se puede estimar que en temporada alta en la ZBE habrá una afluencia de 3.390 turistas extranjeros” que duermen en la zona cada día y cerca de un millar (992), en temporada baja.
