El tramo de bidegorri que pasa junto a la fachada principal de La Bretxa desaparecerá este año con el fin de evitar los encontronazos que tienen lugar en este punto conflictivo. Según explicó este martes el alcalde, Eneko Goia, el carril ciclista actual que sale del Ayuntamiento y llega a la Zurriola pasando por Reina Regente, dejará de tener cambios de lado y será todo recto hasta conectarse con el paseo de la Zurriola. "Actualmente va por el Boulevard en el lado derecho, luego cruza a la Bretxa y luego cambia otra vez. Será todo recto", ha señalado en la primera comparecencia del año, en la que ha dado cuenta de los retos del Gobierno municipal para este año.

En materia de movilidad, Goia ha destacado también el bidegorri de Trintxerpe a Bidebieta y ha recordado que a fin de año estará en vigor la Zona de Bajas Emisiones, con su plan de circulación adherido así como la nueva ordenanza de tráfico.

La ampliación del Topo será "uno de los elementos tractores de la movilidad en el futuro", señaló el mandatario donostiarra, que recordó que este año "llegará el alivio para zonas clave de la ciudad", ya que se podrá reurbanizar la calle Easo y el plaza Xabier Zubiri. Asimismo, "pronto" tendrá lugar el cale (unión de dos túneles) entre el tramo que llega de La Concha y el que llega de Morlans, en las inmediaciones de la estación subterránea de La Concha centro. Entonces, ya estará horadada la totalidad del nuevo trazado en obras.

Obras en la Pescadería

Por otra parte, el primer edil también se refirió a las obras que tienen lugar en el edificio Pescadería de La Bretxa, a donde se tienen que trasladar los asentadores y donde abrirá el ambulatorio de la Parte Vieja, que ha comenzado a ser amueblado recientemente. Las obras de este edificio, en manos de la concesionaria Baika, acumulan un notable retraso y las discrepancias entre ella y el Consistorio son notables. "Estamos en fase de requerimientos, hemos mandado unos cuantos, para que ejecute lo que está obligada", dijo Goia, que añadió que algunas actuaciones están en fase de ejecución subsidiaria a cargo del Ayuntamiento "para que la obra continúe".

"Hay una fecha determinante, que es abril, cuando vencía el periodo para todas las intervenciones, y el Ayuntamiento tomará la decisión que tenga que tomar si sigue produciéndose el incumplimiento reiterado de las obligaciones", señaló el primer edil, que aludió a distintas opciones como "rescate de la concesión, caducidad o la solución que tenga que ser".