El Ayuntamiento de Donostia limitará en enero el año próximo el número de visitantes de los grupos de visitantes acompañados de un guía, según anunció este viernes el concejal de Turismo, Jon Insausti, durante la presentación del Decálogo del Buen Guía Turístico, que se compone de diez recomendaciones.
Además de limitar el número de personas (25 en temporada baja y 20 en alta), el Ayuntamiento aprobará una regulación municipal restrictiva en cuanto a la franja horaria autorizada para poder realizar la actividad de las visitas turísticas. Al ser una actividad económica, la limitación de personas es legal, como se ha hecho en otras ciudades.
Los cambios normativos para limitar las molestias del turismo no compondrán una nueva ordenanza sino que modificarán aspectos de las normas legales ya existentes. Así se ha hecho, por ejemplo, con la prohibición de usar megáfonos en las visitas, que ya forma parte de la normativa de ruidos municipal, tras su retoque para incluir este aspecto. Por ello, el decálogo aconseja usar sistemas de audio individualizados para los visitantes de los grupos.
"Donostia ha sido la primera ciudad vasca en regular la contaminación acústica en la actividad turística y ahora da un paso más, publicando un decálogo de recomendaciones para las visitas guiadas, mientras sigue trabajando para la aprobación de una regulación más restrictiva de cara al año que viene", señaló Insausti.
Por el momento, el Ayuntamiento, Donostia Turismoa y las empresas de guías locales asociadas a la entidad turística, que ascienden una veintena, han acordado el decálogo para lograr el objetivo de "una convivencia sana, en respeto y un turismo sostenible tanto económica, como medioambiental y socialmente", dijo el concejal responsable, que recordó que estos son objetivos del Plan Director de Turismo 2023-2027.
Entre las recomendaciones del decálogo se encuentra también evitar la ocupación de lugares públicos de paso; evitar las áreas más saturadas en verano y en horas punta; poner en valor el patrimonio la cultura así como el atractivo local de la ciudad y el territorio; tener conocimiento de los dos idiomas oficiales de la CAV – euskera y castellano- como mínimo; y animarles visitar la ciudad de una manera sostenible y responsable, etc...
El representante de las empresas de guías turísticos adscritas a Donostia Turismoa, Iñigo Ansa, con quince años de trabajo en el sector, explicó que "el turismo ha cambiado mucho en los últimos tiempos". "Con Internet estamos abocados a otro tipo de turismo, ya que en 24 horas se puede ir a cualquier sitio", recalcó.
Asimismo, recordó que el Gobierno Vasco está en proceso de elaboración de un código ético para quienes trabajan con grupos de visitantes.
Por otra parte, los responsables de Donostia Turismoa reconocieron que algunos de los consejos del decálogo, al menos por el momento, no se podrán exigir. Entre ellos, el que sugiere que el guía sea "buen conocedor de la historia y cultural de la región", algo que no siempre está garantizado. Sin embargo, trabajarán para que así sea, recalcaron.
