La calle Arrasate, ubicada en el Centro de Donostia, ha empezado a acoger a los primeros usuarios del centro de día y los apartamentos creados por la Fundación Zorroaga en el número 51. El inmueble se reconstruido interiormente para su nueva función, manteniendo la fachada protegida y algunos elementos históricos como una vidriera, el techo artesonado en el portal y sus columnas.

La obra ha costado cinco millones de euros y tres años de trabajos, además de un largo periodo de preparativos, ya que la idea empezó a barajarse hace diez años. Tras la finalización de la intervención, a principios de enero, este lunes ha tenido lugar la inauguración oficial del nuevo servicio específico para las personas mayores.

El centro de día que acoge el edificio cuenta con 30 plazas para personas dependientes (niveles 2 y 3 del Baremo de Valoración de la Dependencia) y se sitúa en las plantas bajas. En los pisos superiores se encuentran los 34 apartamentos tutelados, que acogerán a 36 personas mayores autónomas o con un grado leve de dependencia. Con estas 66 nuevas plazas, Zorroaga atiende de forma directa a 430 personas en diferentes servicios.

La directora de Fundación Zorroaga, Aintzane Uriguen, ha destacado en el acto de inauguración que, con la apertura de los dos servicios ubicados en el centro de Donostia, la entidad da “un nuevo paso adelante en la respuesta a las necesidades de las personas mayores con el objetivo de fomentar su autonomía y la permanencia en su entorno”. “Estamos en un proceso continuo de transformación y mejora de nuestras instalaciones y servicios de atención a las personas mayores”, ha añadido.

También han acudido a la inauguración el alcalde de Donostia y presidente del Patronato de la Fundación Zorroaga, Eneko Goia, así como la diputada foral de Políticas Sociales, Maite Peña; el exdirector de Zorroaga, Mikel Agirrezabal; y la responsable de los apartamentos, Mailo Miguel. Todos han destacado la mejora que supone la puesta en marcha del nuevo edificio para los mayores donostiarras.

Goia ha manifestado que el proyecto "pone el foco en el modelo de cuidados y atención de Donostia" y ha recalcado que "la calidad de las prestaciones y servicios que va a ofrecer a las personas usuarias es óptima". "Es un proyecto del que nos sentimos orgullosos y con el que Donostia da un ejemplo”, ha añadido.

Uno de los apartamentos del edificio de la calle Arrasate Javi Colmenero

Por su parte, Maite Peña, ha señalado que Gipuzkoa ya no está en una fase experimental en relación al modelo de cuidados, sino que el cambio es una “realidad” en el territorio. Además, ha destacado "la fuerza del tercer sector social de Gipuzkoa" y ha recalcado que todas las partes implicadas avanzan “con un rumbo compartido y un objetivo común: mejorar cada día la calidad de vida de las personas”.

El centro de día permite que las personas residentes en el centro de la capital guipuzcoana y sus familias tengan cerca de casa el nuevo servicio, lo que reduce la necesidad de utilizar transporte adaptado y permite que las personas sigan en su entorno habitual. 

El edificio reconstruido tiene cinco pisos con accesos independientes para los apartamentos y para el centro de día. Los apartamentos se distribuyen en las cinco plantas del inmueble. Las tres primeras cuentan con ocho apartamentos individuales cada una, mientras que otros siete se ubican en la cuarta planta y tres en la quinta. Dos de ellos son dobles.

En la quinta planta hay una terraza comunitaria mientras que en el semisótano hay una sala de estancia para los residentes en los apartamentos, entre otros servicios como lavandería.

Sala de estar del centro de día de la calle Arrasate 51. Javier Colmenero