El alcalde de donostia, Eneko Goia, ha afirmado este jueves que acoger las primeras etapas del próximo Tour de Francia en Euskadi supone "un gran reto organizativo", pero que "merece la pena".

Goia se ha referido así, en una entrevista concedida a Euskadi Irratia, al inicio de la cuenta atrás de los 100 días que faltan para la salida del Tour de Francia en Bilbao el próximo 1 de julio, con una segunda etapa que acabará en la capital guipuzcoana y una tercera que volverá a pasar por Donostia camino de Baiona.

El alcalde donostiarra ha recordado que Donostia ya acogió la salida del Tour en 1992 y que ahora acogerá la meta de la segunda etapa y un tramo de la tercera, demostrando que, "sin lugar a dudas, San Sebastián está totalmente ligada a las pruebas ciclistas".

De esta forma, ha asegurado que el trabajo organizativo "es grande y no es ninguna broma", por los condicionantes que requiere acoger la carrera ciclista por etapas más grande del mundo, pero que, en todo caso, "van bien".

Además, ha considerado que, el hecho de disputarse en pleno verano, conllevará "dificultades" en la gestión de la organización de la carrera por el gran número de visitantes que en esas fechas habrá en la capital donostiarra. "Esos días nos van a dar mucho trabajo, pero merece la pena. Creo que acoger en nuestra ciudad una prueba deportiva con semejante proyección, merece la pena. Es una apuesta que hicimos como país, y estamos trabajando como país", ha asegurado.