La Junta de Gobierno prevista para hoy en el Ayuntamiento de Donostia dará su visto bueno a la ampliación de fondos económicos para seguir retirando amianto en zonas del barrio de Altza.

En concreto, se eliminarán 31.000 euros de uno de los apartados del presupuesto relacionados con el cambio climático para actuaciones de eliminación del material contaminante.

La presencia de amianto en el solar del polideportivo retrasó notablemente las obras de construcción de la nueva instalación, abierta el pasado verano, además de incrementar su coste hasta los 20 millones de euros en total. Para la creación de piscinas exteriores se ha tenido que crear una plataforma que sella el terreno, de modo que el amianto no puede salir al aire libre, como obligan las normativas de seguridad.

Además, este material, procedente tanto de una antigua fábrica como de vertidos que personas o empresas arrojaban en las zonas verdes de Altza, ha dado como resultado que distintos puntos del barrio han contado con contaminación por amianto. Junto al polideportivo, en la vaguada de Larres, el terreno tuvo que ser tapado con lonas plásticas y posteriormente llenado con tierra vegetal para convertirse en una zona de paseo al aire libre.

El amianto también ha sido el responsable de que se tuviesen que anular unas huertas creadas para el uso ciudadano junto al camino de Marrus.

Asimismo, la presencia de fibrocemento echó por tierra el proyecto para construir un aparcamiento público al aire libre en la zona de Félix Iranzo. Aunque en un primer momento no se detectó amianto, una vez empezadas las obras sí apareció, por lo que el proyecto quedó suspendido.

El director del departamento de Medio Ambiente del Ayuntamiento reconoció el pasado mes de marzo que la presencia de amianto ha generado “muchos gastos y costes de trabajo” y que, aún y todo, a veces son insuficientes para detectar las zonas contaminadas y sanearlas.