donostia - El Ayuntamiento de Donostia ha emprendido los trámites necesarios para actualizar y modificar la ordenanza municipal de ruidos y vibraciones. El texto actualmente vigente data del año 2000 y el Gobierno municipal considera que es necesario revisarlo para adaptarlo a la normativa actual: “Es la forma más eficaz para prevenir y reducir la contaminación acústica”.
Siguiendo el procedimiento habitual en estos casos, de momento y de manera previa el Ayuntamiento ha habilitado un plazo para que los ciudadanos hagan las aportaciones que consideren oportunas, un plazo que se cerrará el día 27. A partir de ahí se elaborará un borrador más concreto en el que se concretarán las líneas de trabajo y las áreas susceptibles de mejoras.
La ordenanza tiene como objetivo establecer los límites y determinaciones técnicas necesarias para proteger y mejorar la calidad ambiental frente a la contaminación acústica por ruidos y vibraciones, que pueden ser originados tanto en el ambiente exterior como en el interior. Así, se regulan tanto las características específicas de los aislamientos acústicos de distintas actividades como el sonido transmitido o el derivado del funcionamiento de su maquinaria e instalaciones.
El Consistorio de Donostia encargó en 2012 (aunque se hizo a partir de datos de 2011) un mapa del ruido de toda la ciudad en el que se reflejaba que casi 13.000 personas estaban sometidas a una contaminación acústica superior a la recomendada. En la mayoría de los casos, el ruido excesivo procedía principalmente del tráfico urbano, de carreteras interurbanas y del ferrocarril y se propusieron distintas actuaciones, sobre todo dirigidas a calmar el tráfico.
En lugares como la Parte Vieja el origen del ruido excesivo procede, en cambio, de las actividades de ocio y un informe encargado por la asociación Parte Zaharrean Bizi el año pasado concluyó que se superan los límites de ruido recomendados tanto de día como de noche. - A.Z.
