donostia - El Ayuntamiento de Donostia ha encargado el desarrollo de un proceso participativo en Amara Berri para reflexionar sobre los espacios públicos del barrio de manera integral y para plantear un plan de acción a partir de las propuestas de los vecinos. “Queremos lograr un análisis compartido para concretar deseos y necesidades”, explicó ayer la concejala de Participación Ciudadana, Duñike Agirrezabalaga, en la presentación del plan.
Agirrezabalaga explicó que el proceso lo gestionará Paisaje Transversal y que consistirá en reuniones previas, entrevistas y encuestas y talleres participativos (también un mapeo colaborativo, un recorrido por el barrio para plantear propuestas en distintos puntos) para presentar finalmente un plan de actuaciones. Arrancará en otoño y durará unas doce semanas.
Junto a ella comparecieron Iñigo García e Iñaki Olasagasti, de la asociación de vecinos de Amara Berri. “El barrio se ha quedado obsoleto, no se ha reformado nada en 60 años. Por eso pedimos esta reflexión junto a hosteleros y comercios”, explicó Olasagasti, que añadió que su objetivo es “dar vida” al barrio.
Destacó, concretamente, la situación del comercio de Amara, “que necesita ayuda”. Añadió que una de sus reivindicaciones en un barrio con tantas plazas interiores puede ser la peatonalización de Gregorio Ordóñez que permita “abrir” Arcco y convertirse en un punto de encuentro. Se trata de una propuesta que han presentado en el proceso de presupuestos participativos y que el Gobierno municipal ve con buenos ojos, según afirmó ayer el concejal de Impulso Económico, Ernesto Gasco.
El también teniente de alcalde añadió que el objetivo de este proceso es repensar el barrio “de manera integral”, intentar dinamizar “la ciudad construida” y pensar en cómo cohesionar las distintas zonas de Amara Berri, el barrio más poblado de la ciudad con unos 35.000 habitantes. “Se hablará de todo, también de posibles usos de la Subdelegación del Gobierno”, concluyó Gasco. - A.Z.