donostia - El alcalde de Donostia, Eneko Goia, defendió ayer que sea la sociedad Kursaal la que se encargue de la “comercialización” de los espacios del Palacio de Miramar con el fin de que este edificio consiga usos que eviten un déficit continuo. Goia justificó el encargo a la gerencia de la sociedad Kursaal de un estudio sobre los posibles usos para el palacio real, que ha aconsejado habilitar un hotel en parte del complejo, así como un restaurante, que puedan aportar ingresos al consorcio que lo gestiona.
Ante el anuncio del Departamento de Cultura del Gobierno Vasco de dejar el Consorcio del Palacio de Miramar -por la salida de Musikene de estas instalaciones- se prevé que las únicas instituciones que se hagan cargo del inmueble sean la Diputación y el Gobierno Vasco. Se estudia que el departamento de Turismo, en concreto una parte de Basquetour, pueda pasar a usar las instalaciones, pero, por el momento, no hay una decisión.
Goia defendió el encargo, realizado por él mismo y por el diputado general, Markel Olano, de un estudio sobre los usos de Miramar a la sociedad Kursaal “porque tiene una estructura especializada en la atracción de congresos y apta para encargarse de la comercialización del palacio Miramar, como hace con éxito en el Kursaal”. “Una de dos, o creas una estructura nueva, o utilizas la que ya tiene una experiencia y además con resultados que son solventes”, añadió.
El estudio de aproximación presentado por el gerente del Kursaal no significa que haya una decisión adoptada, aseguró el alcalde. Sobre las críticas recibidas de distintos partidos ante la posibilidad que parte del Palacio de Miramar acoja un alojamiento, Goia manifestó que “el nivel de debate” es “exasperante”.
El mandatario jeltzale se refirió también al rechazo expresado por el diputado foral de Cultura y Turismo, Denis Itxaso, un repudio no compartido por el portavoz foral, Imanol Lasa, que defendió “explorar” la posibilidad de ubicar un hotel y un restaurante. “Le he dicho a Itxaso que si no quiere que se ubique un hotel, pues bien, pero también le pregunto cuánto más va a aportar la Diputación para que no haya déficit”, manifestó el alcalde de Donostia, que insistió en que el equilibrio de cuentas es el objetivo final de los estudios iniciados por parte de la sociedad Kursaal para que Miramar pueda compatibilizar los usos actuales de los Cursos de Verano, actos y jornadas de distintas clases, bodas y celebraciones, con unas cuentas equilibradas que no requieran aportaciones extraordinarias de las instituciones. “He escuchado críticas pero hasta el momento no he oído alternativas”, lamentó. Asimismo, Goia reconoció que la propuesta para crear un parking subterráneo bajo los jardines de Miramar está “ahora muy fría”.
Además de las declaraciones de Itxaso, la posibilidad de que se ubique un hotel en la construcción de 1893 fue criticada esta semana por los grupos municipales de EH Bildu e Irabazi, que rechazaron la posibilidad de “privatización” de un espacio público si se materializa un hotel.
“se incumple la negociación” También la portavoz del PP, Miren Albistur, criticó esta posibilidad. “En principio no nos parece bien porque, en todo caso, el estudio lo tendría que hacer el Palacio de Miramar y no el Kursaal”, señaló la corporativa. Albistur subrayó que fue una enmienda del PP en el Parlamento Vasco la que permitió que el Gobierno Vasco siguiese aportado en 2017 su cuota en el Consorcio del Palacio de Miramar. “No estaba previsto ni un euro y conseguimos una partida de 100.000 euros, 60.000 de ellos para los gastos corrientes”, dijo la edil popular, que se mostró muy molesta por el hecho de no haber sido informada del encargo del estudio al Kursaal, entidad en la que su formación no cuenta con representación. Asimismo, censuró que “habiendo dos partidas pactadas, para que se realicen los estudios correspondientes, se incumpla el acuerdo y la negociación política que alcanzamos”.
Albistur criticó también al departamento de Cultura del Gobierno Vasco por “abandonar de manera unilateral el consorcio del Palacio Miramar, es decir, nuevamente abandona San Sebastián”. “Una vez más, el PNV se olvida de San Sebastián porque para el Bellas Artes o el Guggenheim hay todo el dinero, pero no para Miramar”, lamentó.