donostia - La Junta de Gobierno de Donostia aprobará hoy el expediente para contratar la explotación del local hostelero ubicado en el paseo de la Zurriola, que se encuentra sin uso desde el pasado otoño, después de que el Ayuntamiento rescindiese el contrato con el anterior gestor por impagos. Ahora, el Ayuntamiento pretende acelerar los trámites con el fin de que este local, que puede ser tanto bar como restaurante y discoteca, sea explotado por una nueva empresa. A causa de los plazos administrativos necesarios, el nuevo negocio no estará disponible antes de verano y, como pronto, podría abrir sus puertas en agosto, según fuentes municipales.

El procedimiento abierto que aprobará hoy el Gobierno municipal prevé que el contrato con la empresa que resulte seleccionada finalice en febrero de 2026, la misma fecha en la que termina la concesión del Estado al Consistorio sobre este local. No obstante, el contrato podrá prorrogarse otros siete años más, siempre y cuando Costas alargue a su vez la concesión, el Ayuntamiento esté de acuerdo con el funcionamiento del local hostelero y la empresa invierta 125.000 euros en mejoras durante el plazo de adjudicación.

Entre las condiciones que serán aprobadas hoy para seleccionar la firma explotadora se encuentra igualmente la necesidad de llevar a cabo una inversión inicial de 60.000 euros en el local para mejorar sus instalaciones, además de pagar al Ayuntamiento un canon anual de 27.500 euros, que es la misma cantidad que cobra Costas al Consistorio. Los ingresos para las arcas municipales llegarían del 2,5% de la facturación que la empresa hostelera deberá abonar al Ayuntamiento, según otra de las cláusulas del concurso.

canon El canon estipulado en el pliego que será aprobado hoy es inferior al que rigió el anterior concurso y que ascendía a 96.000 euros anuales en 2016, según explicó en su momento el gestor de la instalación, que manifestó que el negocio no daba para pagar semejante cantidad, ya que en los meses de invierno la actividad es poco lucrativa.

El restaurante Branka, situado junto al Peine del Viento, también busca un nuevo explotador, después de que el establecimiento echara el cierre este mismo año. En este caso, es el Club de Tenis el propietario de la concesión y sus gestores se han mostrado confiados en encontrar un nuevo explotador que permita abrir el local hostelero ubicado, al igual que el de la Zurriola, en un agradable entorno frente al mar. En este caso, la concesión que tiene el Club de Tenis finalizará en año y medio.

Fuentes municipales señalan que las concesiones resultan en ocasiones problemáticas, ya que los gestores de los locales no se animan a llevar a cabo inversiones de importancia dado que sus negocios tienen la fecha de caducidad del fin de la concesión.