donostia - El Plan Especial de Patrimonio Urbano construido (Peppuc) permitirá que el edificio del Bellas Artes pueda transformarse en un hotel. Así, al menos, se desprende de las intenciones de los distintos grupos de la oposición, que presentarán enmiendas a la propuesta de catalogación C aprobada por Bildu, que obliga a mantener las fachadas o a recrearlas de modo idéntico.
Tanto los socialistas como los populares ya han anunciado que presentarán enmiendas para que este edificio tenga una catalogación de grado D que, en la práctica, permite derribar el inmueble para construir otra edificación similar aunque, en este caso, podría disponer de más ventanas de modo que el uso de hotel que pretende su propietaria sería posible. Esta posibilidad permitiría una operación similar a la que se llevó a cabo en La Perla, que es una copia de edificio que fue demolido hace más de veinte años.
El PNV, por su parte, no quiso avanzar ayer el contenido concreto de su enmienda, aunque anunció que su propuesta posibilitará la protección del edificio, así como que pueda albergar un uso hotelero. "Que se proteja y se pueda usar", señalaron.
En estas circunstancias, y dado que la posición de Bildu es minoritaria dentro de la Corporación, parece que las posturas de los distintos grupos políticos favorecerán que la empresa Sade pueda ejecutar su proyecto.
Por otra parte, el Bellas Artes solo es uno de los más de un millar de edificios de Donostia incluidos en el Peppuc. En concreto, el portavoz del PSE-EE, Ernesto Gasco anunció ayer que su formación presentará una quincena de enmiendas al plan. Por ejemplo, propondrá proteger algunos edificios especiales posteriores a 1950.
excepciones El Peppuc, en principio, no incluye inmuebles creados después de esta fecha, pero los socialistas desean añadir algunas excepciones para las construcciones de Rafael Moneo -el Kursaal, el edificio de Ramón María Lilí o la iglesia de Iesu-, así como la para sede de la Cámara de Comercio, la de la Unión Farmacéutica, el edificio de Coca Cola en Rekalde, la sede de Hacienda de la calle Oquendo, algunas viviendas del Urumea, el colegio El Carmelo, el instituto Zubiri-Manteo y el inmueble de Fuenterrabía 2.
Por otra parte, el Peppuc ha vuelto a incluir los edificios protegibles de Igeldo que, tras el decreto foral de desanexión del pasado mes de diciembre, fueron excluidos del documento. Ayer, el concejal de Urbanismo, Ricardo Burutaran, admitió en la comisión de Urbanismo, que Igeldo había vuelto al Peppuc, tras la suspensión cautelar del decreto foral.