Donostia. "Es imposible coger el coche estos días y mucho más complicado lograr aparcarlo", afirman las personas que, a pesar de las colas para entrar en los autobuses, esperan la llegada de aquel que les lleve a otra zona de la ciudad.

Donostia se llena de gente estos días en los que celebra su Semana Grande y los donostiarras y la gran cantidad de visitantes que ocupan las calles agradecen la ampliación de los servicios de transporte público. "No tienes que esperar mucho hasta que llega el siguiente -afirman-, y es mucho más cómodo moverse así por la ciudad".

De esta manera, la ciudad no solo ofrece un medio de transporte disponible día y noche sino, también, una manera sostenible de atraer gente de otras ciudades a sus calles. Es inevitable ver colas en la entrada a la ciudad y en las puertas de los parkings, por lo que el transporte público se convierte en algo cada vez más necesario en estas fechas festivas. Los autobuses viajan repletos de gente y facilitan la descongestión de las zonas principales de la ciudad, permitiendo que los ciudadanos se muevan de una manera rápida y segura