Donostia. El PNV de Donostia alertó ayer de que muchas de las alegaciones presentadas por los funcionarios municipales en contra de la valoración de puestos de trabajo aprobada recientemente pueden acabar en los tribunales contencioso-administrativos y, en caso de ganar, acarrear un gasto inesperado para el Ayuntamiento en el futuro.
El concejal nacionalista Juanra Viles recordó que ayer mismo terminó el plazo de presentación de alegaciones y aseguró que solo el pasado miércoles se presentaron más de 130. Fuentes sindicales calculan que más de 300 trabajadores del Ayuntamiento han presentado por escrito su queja ante una valoración que, si bien eleva los sueldos de algunas categorías como las de los bomberos o agentes de movilidad, reduce los de numerosos cuadros técnicos del Ayuntamiento, así como los de guardias municipales que trabajan a turnos.
Viles consideró que la forma en la que el Ejecutivo de Izagirre ha llevado la valoración de puestos de trabajo "ha provocado una generalizada repulsa por parte de la plantilla". Asimismo, añadió que "el Gobierno municipal tiene una patata caliente con este asunto y su pésima gestión va a hacer que se convierta en un problema para el conjunto de los donostiarras debido a que muchos trabajadores manifiestan estar dispuestos a acudir a los tribunales para defender sus derechos". Viles concluyó: "Nos tememos que las consecuencias de una actuación mal conducida por el Gobierno municipal las van a terminar pagando los donostiarras con el dinero público".
La valoración de puestos de trabajo del Ayuntamiento no afecta a todos los empleos, solo a aquellos que estaban pendientes. Los cambios en los complementos de dedicación y en los pluses que conllevan las modificaciones son los responsables de que algunos trabajadores puedan llegar a perder hasta 800 euros al año, como en el caso de los guardias municipales, o hasta más de 6.000 en el caso de algunos altos funcionarios. El sindicato ELA es contrario a muchos de los cambios de la valoración, mientras que LAB los apoya.