DONOSTIA. El Ayuntamiento de Donostia y la Diputación de Gipuzkoa han afirmado, en la reunión que la comisión interinstitucional para la eliminación del viaducto de la avenida de Carlos I ha celebrado este miércoles, que la salida de la ciudad por la citada vía podría cerrarse en abril.

No obstante, el Consistorio donostiarra ha advertido de que este proyecto "no es compatible" con la construcción de la pasante del llamado Metro de Donostialdea por el Centro de la capital guipuzcoana, por lo que uno de estos dos proyectos se tendría que "retrasar".

En un comunicado, la concejal donostiarra de Infraestructuras, Nora Galparsoro, ha indicado que en al citado encuentro no ha acudido ningún representante de ETS.

Además, ha señalado que para que el cierre de la salida de la ciudad por Carlos I sea una realidad en abril es "imprescindible" la puesta en funcionamiento de la autovía del Urumea.

Según ha afirmado, en estos momentos se está estudiando la influencia que tendrá en el tráfico el cierre de la salida a la variante. Galparsoro ha indicado que "todos los problemas están resueltos, excepto dos el tramo entre las avenidas de Zumalakarregi y de Tolosa y la rotonda de Martutene".

La comisión volverá a reunirse en enero para estudiar si el cierre de la salida es viable y definir los cambios a realizar en las vías del entorno, aunque Galparsoro ha apuntado que "no se prevé que sean muy importantes".

METRO Por otro lado, ha señalado que para cerrar la entrada de la variante a Carlos I "es preciso elevar la rotonda de Martutene, lo que hará necesario volver a abrir la salida de la avenida de Carlos I".

Finalmente, ha aseverado que "el cierre de las entradas y salidas de Carlos I a la variante es una prioridad del Ayuntamiento".

No obstante, ha afirmado que el cambio que se prevé hacer en Carlos I "no es compatible" con el proyecto de pasante del Metro de Donostialdea por el centro de la ciudad, ya que "tendrá diversas consecuencias en la circulación", por lo que esto "exigiría retrasar uno de los dos proyectos".