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Donostia reclama a Arriola una reunión para hablar del funicular de Igeldo

el consistorio pide una compensación si se plantea cederle la gestión del trenEl Gobierno municipal critica que se saque a concurso su explotación sin resolver a quién compete y pide que se proteja

Donostia reclama a Arriola una reunión para hablar del funicular de IgeldoJon Ibañez

Donostia. El Gobierno municipal de Donostia ha solicitado formalmente una reunión al consejero de Transportes, Iñaki Arriola, para aclarar el futuro del funicular de Igeldo y conocer las intenciones del Gobierno Vasco respecto al tren. El concejal de Movilidad, Jon Albizu, recuerda a Arriola que el Ejecutivo autonómico presentó un anteproyecto de ley para que este tipo de funiculares pasen a ser competencia municipal.

El Gobierno municipal presentó alegaciones y, de todos modos, reclama que se le compense económicamente si se le va a ceder la gestión del funicular. En la misiva enviada a Arriola, Albizu incide en que será necesario "establecer un diálogo" con los ayuntamientos implicados antes de aprobar la ley.

Asimismo, con ese proceso en marcha y aún sin resolver, Albizu critica que el Gobierno Vasco vaya a sacar a concurso la explotación del tren y que el Consistorio haya tenido noticia de esas intenciones "a través de la prensa". Por ello, el concejal donostiarra insiste en que al Ayuntamiento le gustaría "disponer de toda la información sobre el funicular que tiene el departamento de Transportes".

monte igueldo En realidad, el funicular fue construido por la Sociedad Monte Igueldo y ha sido esta quien lo ha gestionado durante casi 100 años. Sin embargo, en su momento se estableció que la explotación se realizaba bajo la fórmula de una concesión y estas, como máximo, pueden prolongarse 99 años. Ese periodo se cumplió en enero y de ahí que el Gobierno Vasco, actual titular de la infraestructura, anunciara un nuevo concurso que, de momento, sigue sin convocarse.

Por otro lado, fuentes del Departamento de Transportes plantearon hace unas semanas la posibilidad de cambiar el estilo de los vagones por otros más modernos para adecuarlos a la normativa de accesibilidad y seguridad. Para intentar evitarlo, un grupo de ciudadanos ya ha pedido que el funicular se declare bien cultural y se protejan, así, sus características actuales e históricas.

En la carta enviada a Arriola, Albizu muestra su "interés" en abordar la cuestión para proteger la infraestructura.