LA asociación de vecinos Izbe (Intxaurrondo Zaharreko Bizilagunen Elkartea) y la comisión de fiestas del barrio han organizado una celebración en el parque Txaparrene para el sábado día 10 debido a la finalización de las obras que han cubierto la trinchera de las vías del tren, que dividían el barrio en dos. En este espacio se ha construido una nueva estación de tren y una plaza de 3.700 metros cuadrados -con una zona de juegos infantiles- que será el escenario de la celebración.
De entre las actividades organizadas para la jornada del sábado destaca, en primer lugar, la actuación del conocido payaso Porrotx a las 13.00 horas. Seguidamente, a las 14.00 horas, se podrá disfrutar de un aperitivo popular. A continuación, de 16.00 horas a 18.00 horas, los más pequeños podrán divertirse en los castillos hinchables instalados para la jornada.
Esta nueva plaza responde a las continuas reivindicaciones por parte de los vecinos de la zona, que llevan años pidiendo la unión del barrio con la cobertura de las vías del tren. Sin embargo, los afectados solo han conseguido cubrir una parte de la trinchera que dividía la zona en dos, por lo que, a día de hoy, todavía queda una parte del distrito separado por el trazado ferroviario.
En este sentido, los representantes de la asociación de vecinos Izbe, lejos de dar por terminada la obra, consideran que esta construcción es "la primera fase del proyecto" y "un paso adelante". Además, sostienen que el festejo del próximo sábado tiene como fin "reivindicar la consecución de la segunda fase de la cobertura".
Los vecinos
Sabor agridulce
Una de las vecinas de la zona se mostró ayer muy orgullosa con la nueva estación ya que, hasta la fecha, tenía que desplazarse hasta las estaciones de Herrera o Ategorrieta. "Ahora, gracias a la creación de esta nueva parada, estamos mucho mejor comunicados", añadió.
Además, la vecina reconoció que la zona ahora, además de más bonita y dotada de un parque infantil, "va a dejar de emitir los ruidos que el paso del tren producía cuando no estaba cubierto". "Eso, para los vecinos, era bastante insoportable", agregó.
Sin embargo, coincide con la opinión de la asociación de vecinos y piensa que "ahora hay que conseguir cubrir la otra parte del barrio".
Un tendero de uno de los establecimientos del entorno confesó que "a pesar de que la obra ha durado alrededor de dos años y ha producido mucho ruido, ahora, por fin, el barrio ya está unido".
Los vecinos han sido, sin lugar a dudas, los protagonistas de la obra. Además de las continuas protestas que han protagonizado a lo largo de varios años, han participado activamente en el diseño del nuevo parque.
El proyectado por los técnicos municipales no resultó del agrado de muchos residentes cuando fue presentado en público por lo que algunos colectivos afectados aportaron en su día sus ideas.
A raíz de esa situación, la asociación Izbe presentó varias propuestas al Consistorio, quien a través del departamento de Participación Ciudadana, abrió un proceso de aportación de ideas que se han tenido en cuenta para el diseño definitivo, que fue modificado en algunos puntos.