Donostia. El Partido Nacionalista Vasco (PNV) propuso ayer que Donostia cuente con un centro de coordinación entre la Guardia Municipal y la Ertzaintza, en el lugar que hasta hace unas semanas ocupaban los bomberos en la calle Easo. Esta proposición fue presentada por el portavoz del PNV, Eneko Goia, y los concejales Iñaki Gurrutxaga y Martin Ibabe, quienes destacaron que este centro evitaría "duplicidades" entre los cuerpos, permitiría "mayor agilidad a la hora de actuar" ante cualquier incidente y serviría para un intercambio de información a tiempo real entre las policías.

El portavoz jeltzale, sin "querer generar falsos alarmismos", aseguró que de un tiempo a esta parte la criminalidad en Donostia ha tenido un leve aumento. Por otro lado, apuntó a que los donostiarras no tienen una buena "percepción" sobre la seguridad en la ciudad.

En este punto, Gurrutxaga dio una serie de datos. En el año 2003, por cada 1.000 habitantes se cometían 25,5 delitos en Donostia, mientras que en 2009 esta cifra ascendía a 36 delitos por millar de habitantes. Aun así, Gurrutxaga reconoció que Donostia cuenta con una menor tasa de delitos con respecto a las otras dos capitales de la CAV.

Ibabe, por su parte, indicó que "en materia preventiva" tener una sede de coordinación sería "fundamental" para evitar "duplicidades" y permitiría "organizar un sistema de prevención que abarcaría muchos más barrios de la ciudad".

Goia propuso, además, que esta sede se instale en el antiguo parque de bomberos de la calle Easo, que en breve será vaciado debido al traslado de los agentes antiincendios a su nuevo hogar en Intxaurrondo. "El traslado nos permite poder disponer del edificio de la calle Easo, más allá de lo que hoy en día da de sí. Es decir, ahí quedan espacios libres que podrían ser utilizados para el establecimiento de este centro", apuntó el portavoz.

Este centro de coordinación entre los dos cuerpos de Policía ya cuenta con un antecedente en Bilbao, donde la sede, según el portavoz del PNV, funciona "muy bien". Gurrutxaga relató que en la década de 1990 el Departamento de Interior comenzó a hablar con el Ayuntamiento de Bilbao sobre este asunto. En 2006 ambas instituciones firmaron un convenio para la creación del centro.

Asimismo, añadió que la experiencia de la capital vizcaina es exportable y que Donostia "ha perdido el tiempo no haciéndolo". A este respecto, Gurrutxaga consideró que "ha habido un prejuicio político" por parte de los anteriores gobiernos socialistas a la hora de crear esta sede, "en el sentido de evitar la colaboración con el Gobierno Vasco". "Creo que esto es expresión de ese tipo de política y que con eso hay que acabar", sentenció Gurrutxaga.

comisarías en los barrios Por otro lado, el portavoz jeltzale también sugirió que se instalen comisarías de la Guardia Municipal en algunos barrios de la ciudad. Estas sedes deberían colocarse en aquellas zonas que, "por circunstancias físicas", se encuentren lejos a la comisaría principal de la Policía local o en lugares donde la tasa de delitos presente "una problemática clara".

Una de esas comisarías, "en una primera aproximación", debería situarse en la zona este de la ciudad, en los barrios de Altza e Intxaurrondo. De hecho, Goia explicó que en reuniones mantenidas con los vecinos de estos barrios, la instalación de estas sedes policiales era una petición "unánime".

Asimismo, los vecinos trasladaron al PNV que muchas veces se ven "más agentes de la Ertzaintza que de la Guardia Municipal" haciendo rondas por las calles. La construcción de estas comisarías llevaría a los donostiarras a tener mejor percepción sobre la seguridad ciudadana, consideró Goia.

Por otro lado, explicó que debería existir un protocolo que permitiera a la Guardia Municipal tener relaciones directas con las asociaciones de vecinos de todos los barrios. Según los jeltzales, el departamento de Barrios del Ayuntamiento tendría que trabajar para lograr una colaboración entre los barrios y la Policía de la ciudad.