La ikastola Intxaurrondo cierra el programa Camino Escolar

Donostia. Más de 6.000 escolares de ocho a doce años han participado este año en la campaña de educación vial que se ha desarrollado en Donostia. Los alumnos de la ikastola Intxaurrondo han sido los encargados de cerrar esta iniciativa con un proyecto piloto destinado a mejorar la seguridad de los niños que se desplazan al colegio a pie, dentro del programa Camino Escolar.

Durante dos semanas, catorce personas voluntarias han participado en este proyecto con el que se trataba de evitar que los coches de los padres que trasladan a los niños a la ikastola aparcasen sobre las aceras y provocaran situaciones de peligro, ya que la ocupación espacial de los vehículos dificultaba la visibilidad de los viandantes.

Según explicó ayer la directora del colegio, Koro Munduate, la gravedad de la situación era ya patente cuando llegó a producirse el atropello de una de las alumnas de la ikastola a principios de este año. Este suceso, que finalmente no tuvo consecuencias graves, llevó a los responsables del centro y a los padres de alumnos a solicitar la actuación del Ayuntamiento.

De esta manera, pusieron en marcha un plan para que quince adultos agruparan a los alumnos en distintos puntos y les acompañaran hasta el colegio. Además, buscaron la implicación de las asociaciones y los establecimientos del barrio, con lo que han logrado un resultado "altamente positivo", destacó Munduate.