Lencería de toda la vida, en La Consti
El cierre del Andorrano ha animado a sus trabajadoras a abrir una nueva tienda en la parte vieja
LOS armarios más selectos están de suerte. Aquellos y aquellas para los que el cierre del Andorrano iba a suponer un problema para encontrar el regalo perfecto, ya tienen en marcha una nueva tienda de lencería fina. Y todo ello, a escasos 200 metros de la anterior: Lencería La Consti, en la calle San Jerónimo de la Parte Vieja.
El Andorrano podría considerarse una institución en la venta donostiarra de lencería, ya que, siendo la segunda tienda más antigua de la capital guipuzcoana, lleva desde 1860 trasladando diseño, también, a los paños menores de las señoras y los caballero donostiarras. La jubilación de su actual dueña, Elena Laburu (familiar del fundador, Santiago Lafont), ha forzado el cierre de la tienda, que tendrá lugar a lo largo de la semana que viene.
Sus trabajadoras, las hermanas Mari Mar y Ana de Sosa, que llevan 14 y 25 años, respectivamente, trabajando en el antiguo comercio, han querido poner en marcha un renovado local, más actual y moderno, pero donde la ropa de cama siga siendo tema de culto. Bordados, sedas, linos y puntillas seguirán vistiendo cuerpos a escondidas, siempre con un toque chic y a la vista de pocos.
"Sin ser el Andorrano, es una continuidad del mismo", explica Mari Mar y añade que ofrecen la misma calidad y profesionalidad de siempre en la atención al cliente". La antigua trabajadora del Andorrano asegura que, además, el género y los distribuidores continuarán siendo los mismos, pues lo consideran como la verdadera razón del éxito de la antigua tienda. "Había mucha clientela fija de Madrid, Cataluña y Francia que venían a comprar aquí porque hay prendas que no encuentran allí".
De hecho, por continuar con la tradición, mantendrán hasta al escaparatista: "Patxi, el encargado de arreglar el escaparate del Andorrano, también nos ha ayudado". Y es que estas hermanas solo tienen palabras de agradecimiento "para todos: empezando por Patxi, siguiendo por la jefa y hasta para las clientas", por ello , reconocen estar "muy ilusionadas" ante la nueva etapa.
comercio antiguo
En proceso de recuperación
El nuevo local, situado en el número 18 de la Parte Vieja, fue inaugurado el viernes y abrió sus puertas, por primera vez, ayer. El horario es de 10.00 a 13.30 y de 16.00 a 20.00 horas, de lunes a sábado, y el lugar cuenta con 40 metros cuadrados de exposición. "Habrá que acostumbrarse a trabajar en un espacio más reducido", bromea Mari Mar, comparándolo con el de la calle Garibay, "pero seguirá habiendo de todo", agrega.
La dependienta asegura que, las clientas están sobre aviso en cuanto al traspaso y que, para algunas, la nueva localización, ha sido un motivo de alegría. "Compradoras de la Parte Vieja nos han contado que, antes, la calle San Jerónimo tenía mucha actividad comercial que se ha perdido", explica la mujer y añade que "dicen que hay que recuperarlas, porque Donostia siempre se ha caracterizado por tener unas tiendas muy selectas".