donostia. Ya ha comenzado la cuenta atrás para la puesta en marcha del ascensor de Azkuene. La concejala de Obras y Proyectos del Ayuntamiento de Donostia, Duñike Agirrezabalaga, explicó ayer que entrará en funcionamiento previsiblemente " a finales de esta semana" o a "comienzos de la próxima", como muy tarde. Después de recibir los permisos de Industria del Gobierno Vasco, tan sólo queda pendiente un "breve" trámite que depende del Consistorio y que podría estar cerrado en "uno o dos días", añadió.

El elevador, que conectará la calle Azkuene -vía compartida por Trintxerpe y Donostia- con Juan Carlos Guerra y Gomistegi en Bidebieta, tendrá capacidad para albergar a ocho personas y permitirá salvar el desnivel de 20 metros existente entre ambos núcleos.

La entrada se ubicará entre los portales 15 y 17 de la calle Azkuene y dispondrá de dos paradas, la primera a seis metros y la segunda a 17, que conectará con Juan Carlos Guerra y Gomistegi. El presupuesto de la actuación es de medio millón de euros.

Se trata de un proyecto que los cerca de 1.500 vecinos del entorno esperaban como agua de mayo. Sin embargo, la espera ha sido larga y los trabajos incómodos, ya que obligaron a comienzos de este año a derribar los más de 100 escalones divididos en tres tramos que permitían el acceso de los peatones a Bidebieta y la calle Azkuene.

Para suplir esta carencia, se colocaron unas escaleras metálicas que partían desde el edificio de la sala Mogambo y que conectaban con Juan Carlos Guerra y Gomistegi. Como consecuencia, para salvar el desnivel de 20 metros y alcanzar Bidebieta desde Azkuene, y viceversa, era necesario superar 130 peldaños.

ascensor de Mundaiz Asimismo, Agirrezabalaga recordó que el elevador que conecta el paseo de Urumea con Mundaiz y la Universidad de Deusto permanece operativo desde hace dos semanas, aunque debido a que acaba de comenzar el curso escolar y a que no se ha culminado el paso peatonal provisional en el entorno del quinto puente, su uso está siendo "escaso", indicó la edil.