Donostia. La rampa mecánica que el Ayuntamiento prevé construir en Lizardi fue objeto de las críticas del concejal del PP José Luis Arrúe. El edil popular criticó la "excesiva demora" con la que se están llevando a cabo las soluciones de movilidad vertical en la ciudad e hizo mención especial a este caso de Intxaurrondo que, además, cuenta con un informe desfavorable del Ararteko, el Defensor del Pueblo. Éste considera esta solución mecánica como "excluyente para las personas con importantes problemas de movilidad". Así lo manifestó tras una denuncia de la Federación Coordinadora de Personas con Discapacidad Física de Gipuzkoa, Elkartu, a petición de una vecina del barrio.
Sin embargo, el departamento de Proyectos y Obras que encabeza la concejala Duñike Agirrezabalaga (Alternatiba), considera la rampa como la mejor solución, después de la negativa de una comunidad de vecinos para ceder terrenos y poder ubicar así en la calle Virgen del Coro otro ascensor. Según el Consistorio, la rampa de Lizardi, una arteria principal de conexión entre Intxaurrondo Zaharra y la zona alta del barrio, es la ubicación que permitiría una mayor utilización de la solución de transporte vertical.
La posibilidad apuntada por el Ararteko, que proponía la instalación de un ascensor en el parque Alice Gulick a la calle de los Luises, atravesando la calle Gaztelu y con posibilidad de llegar hasta el paseo de Zarategi, no convence a los técnicos municipales. Según el Consistorio, esta solución garantizaría el acceso universal, es decir, también a las personas con grandes problemas de movilidad, pero resultaría de menor utilidad pública al encontrarse en una zona más apartada.
Por ello, el Consistorio estudia otras fórmulas para suplir la carencia que la rampa de Lizardi pudiera suponer para estas personas con limitaciones de movilidad. El edil del PP, José Luis Arrúe, apuntó en este sentido que espera una respuesta de la concejala a sus preguntas.