- La temporada de remo va llegando a la recta final y hoy y mañana estará en juego la prestigiosa XLIII. Zarauzko Ikurriña a las 18.00 (EITB). Con la Liga Eusko Label dando giros inesperados cada fin de semana, se disputará la última bandera de la liga con este formato. Orio y Hondarribia partirán entre las favoritas, pero Santurtzi ya demostró en la primera bandera que la regularidad es su fuerte y será complicado batirles en la suma de los tiempos.

La San Nikolas es ahora mismo la segunda clasificada y sigue a la Bou Bizkaia muy de cerca. Orio está a tan solo cuatro puntos del liderato, y la Ikurriña de Zarautz puede ser el trampolín para asaltar la cabeza de la Liga Eusko Label. Hondarribia, por su parte, no será participante de la tanda de honor, pero conoce muy bien la regata. El año pasado fue la más rápida en ambas jornadas y se fue la ganadora después de dar una exhibición. No cabe duda de que la Ama Guadalupekoa, parta de la tanda que parta, dará guerra una vez más en aguas de Zarautz.

Donostiarra, Zierbena y Urdaibai, que también han ganado banderas esta temporada, tendrán opciones de llevarse la Ikurriña a sus vitrinas, pero la regularidad que necesitan para vencer una bandera a dos regatas será muy grande. Lo que le ha faltado a la Torrekua II para ser una trainera puntera, ha sido la regularidad. A pesar de que sea la cuarta clasificada a cinco puntos del líder, no termina de dar el importante salto. Este fin de semana se volverán a poner a prueba, y para ello tendrán una regata a doble jornada. Puede ser el momento de demostrar que tienen la capacidad de ser regulares.

Zarautz se aleja cada vez más de Kaiku -donde se estrenará como entrenador Peio de Vega- , y ya tiene trece puntos de ventaja sobre los vizcainos, que son colistas. Si al comienzo del curso el objetivo era evitar el último puesto, con el paso de las regatas este puede haber cambiado. Los zarauztarras, además, son novenos con tres puntos más que Ares, por lo que también evitarían el play-off. Los remeros de Gari Uranga no tienen un mejor escenario que su casa para dar un golpe definitivo sobre la mesa.