Dos años después, la maratón Zegama-Aizkorri vuelve con una participación de cinco estrellas, una de las mejores en sus 21 años de historia. Por encima de todos sobresale la figura de Kilian Jornet, nueve veces ganador de la carrera y que correrá su primera prueba de montaña de la temporada de la mano de Nnormal, la marca que abandera tras dejar Salomon. Jornet está preparando con mimo una de las pocas pruebas que disputará este año y por la que siente predilección. Adora la Zegama y el público le adora. El catalán solo prevé correr este año cuatro carreras, dos de ellas ultras (Hardrock, en Colorado, en julio, y el ultratrail del Montblanc a finales de agosto). Si el terreno sigue seco como en estas fechas, podría peligrar el estratosférico récord de Stian Angermund en 2017 (tres horas, 45 minutos y ocho segundos).

Jornet será el gran favorito de la carrera, que se presentó ayer en Donostia, aunque tendrá rivales de enjundia como el leonés Manuel Merillas, que llega con varias victorias en el zurrón; y el francés Rémie Bonnet, que ganó la Zegama de 2018. En la salida también estarán Aritz Egea, dedicado en los últimos tiempos a distancias más largas que los 42 kilómetros de la Zegama; Andreu Simon, campeón de España de Trail Running por la Federación Española de Atletismo en Zahara de la Sierra (Cádiz); el mediático Dakota Jones; el también estadounidense Max King; el francés Thibaut Baronian; el catalán Oriol Cardona; y un puñado de corredores de Kenia que son una incógnita. Entre los africanos destaca Ben Kimtai, que ya fue tercero en la Gorbeia Suzien de Zeanuri y que se ha propuesto triunfar en las carreras de montaña, como se refleja en el documental Ben Kimtai. Kenia a la conquista del trail.

Si la participación masculina es de altura, la femenina no le va a la zaga. Con los pronósticos más abiertos, disputarán la Zegama tres corredoras que saben lo que es ganar en la localidad de Goierri: Emelie Forsberg (pareja de Kilian Jornet y que ha vuelto a la competición tras ser madre), Ida Nilsson y Oihana Kortazar. El favoritismo, sin embargo, recaerá en tres corredoras que nunca han corrido la Zegama: la suiza Maude Mathys, la neerlandesa Nienke Brinkman, una casi recién llegada al trail, y la donostiarra Sara Alonso, que lleva una progresión meteórica.

La Zegama volverá a ser puntuable para las Golden Trail World Series, la Diamond League del trail, y no presenta novedades en su tradicional recorrido. Serán 42 kilómetros, con casi 5.000 metros de desnivel, que los cerca de 500 participantes deberán completar en ocho horas como máximo. La salida será a las 9.00 horas y a las 10.30 horas se celebrará la Junior Trail, con un centenar de jóvenes que recorrerán un circuito de 10,4 kilómetros y 1.000 metros de desnivel. La carrera será retransmitida en directo en cuatro idiomas.

Como aperitivo, el viernes 27, a partir de las 16.00 horas, se celebrará el Kilómetro Vertical, en el que los 200 participantes deberán salvar un desnivel de 1.015 metros en apenas tres kilómetros.