- El mes de enero de 2022 va a ser imposible de olvidar para el esquiador Adur Etxezarreta (Areso, 27/1/1996). El día 14 hizo historia al ser el primer esquiador del estado en alcanzar el podio en una Copa de Europa. Fue segundo en la disciplina de fescenso que se celebró en Tarvisio (Italia). Un éxito que corroboró su gran estado de forma y le catapultó una semana más tarde para ser uno de los dos elegidos del equipo de esquí alpino en los Juegos Olímpicos de Invierno en Pekín.

¿Cuando se enteró de que iba a los Juegos Olímpicos de Invierno?

-Fue una semana después del podio en la Copa de Europa. Me llamó el presidente y me dijo que una de las dos plazas era para mí. Fue una satisfacción enorme.

¿Qué es lo primero que hizo?

-Después del podio en Tarvisio sabía que podía ser uno de los candidatos. Me dijeron que uno de ellos iba a ser yo. Empecé a llamar a la familia y a contarles que iba a ir a Pekín.

¿Cómo de lejos veía los Juegos? No entraba en las quinielas iniciales.

-A principio de año sabía que lo tenía difícil. Una de las plazas era clarísima para Quim (Salarich) por los resultados históricos que estaba haciendo. Después estaban Albert Ortega y Juan Del Campo, que habían hecho resultados muy buenos. Yo lo tenía que hacer muy bien. Por suerte enero ha sido un muy buen mes.

Para Areso, su pueblo, en el que viven cerca de 280 personas, es un orgullo tener un vecino olímpico.

-Este deporte no es muy habitual y menos en Areso. Para todos ha sido una noticia muy buena noticia.

A nivel de objetivos que se plantea en Pekín ha comentado en una entrevista reciente que es difícil plantearse un resultado. Va con ganas de hacerlo lo mejor posible y disfrutar de los Juegos.

-No sé qué pista ni qué condiciones me voy a encontrar. Yo lo que tengo que intentar es seguir con el nivel de las últimas carreras. El resultado es difícil porque dependerá de los rivales, la pista... No es un deporte como el atletismo en el que tienes una marca fija y sabes que vas a rendir por ahí. El esquí alpino es un deporte muy abierto. No quiero pensar mucho en el resultado.

También ha señalado que se le dan mejor las pistas rápidas.

-Para mis características me gustaría que fuera una pista bien trazada, sea rápida, velocidades altas y que tenga zonas de deslizamiento porque es ahí donde más destaco. Veremos qué nos encontramos.

¿Cuáles son esas características que le definen?

-Soy un esquiador que en las zonas de deslizamiento estoy entre los mejores del mundo. Las partes técnicas son las que más me cuestan.

Compite en descenso (mañana) y supergigante (martes 8). ¿Cuáles son las características de las pruebas?

-Lo que más varía es la distancia entre una puerta y otra. Descenso es la disciplina más rápida y donde más distancia hay entre una curva y otra. La curva es más larga y rápida. El supergigante está en medio entre descenso y gigante, que es más técnica.

¿En cuál se ve mejor ahora mismo?

-Sin duda, donde más en forma me encuentro es en descenso. En supergigante entrenando soy capaz de hacer muy buenas cosas. Este año he corrido menos en supergigante y vengo menos rodado. Me debería costar un poco más, pero creo que puedo hacer buen papel tanto en descenso como en supergigante.

En enero han ido las cosas muy rápido. Segundo en Tarvisio siendo el primer esquiador del estado que hace podio en Copa de Europa y luego los Juegos Olímpicos. ¿Cómo lo está gestionando?

-Me lo estoy tomando con mucha calma, intentando hacerlo siempre lo mejor posible. Es verdad que este mes justo me están saliendo muy bien las cosas con el segundo puesto en Tarvisio. Después en Saalbach también fue bastante bien -fue séptimo-. Ahora mismo estoy en forma. Ya tendré tiempo de pensar cuando acabe el año de lo que he hecho y no. Sobre todo quiero tomarme las cosas con calma y hacer todo lo mejor posible.

¿Qué hubiese pensado hace un año si le dicen que iba a ir a los JJOO?

-Hubiese pensado que las cosas van según lo planeado. No sabía si iba a estar en los Juegos, pero en cuanto a la Copa de Europa los resultados que estaba haciendo el año pasado sabía que podía estar peleando por algún podio. Y al final lo he conseguido. Ir a los Juegos Olímpicos es una consecuencia de que estoy haciendo bien las cosas. Seguramente me habría extrañado, pero podía pasar.

En una entrevista de 2021 dijo que su objetivo era "entrar en el top 30 de las Copas de Europa regularmente" y "empezar a ser competitivo en Copa del Mundo". El primer objetivo ya lo ha cumplido y con creces.

-En la Copa de Europa he acabado todas las carreras entre los diez primeros y voy sexto en la general. Con eso estamos muy contentos. En las tres Copas del Mundo que he hecho este año he tenido más errores de la cuenta en carrera, pero entrenando he demostrado cosas muy buenas. Siempre puede ir mejor, pero está siendo un año bueno.

¿En qué cree que ha mejorado de un año a otro para haber sido seleccionado para Pekín?

-El año pasado, a principio de temporada, estaba fuerte, pero mentalmente fue duro con todas las restricciones y volver a casa mucho menos. Creo que he cambiado mucho mentalmente y he trabajado desde el año pasado con un psicólogo, Javier Domínguez. Con la experiencia que tuvimos el año pasado, hemos intentado mejorar las lagunas y los fallos que tuve. Ese es el gran cambio que he dado. A nivel de esquí he avanzado táctica y técnicamente. El esquí es un deporte muy mental y ahí he dado el gran cambio.

¿Diría que la ayuda de un psicólogo ha sido decisiva en su carrera?

-Sí. Creo que trabajar con un psicólogo es una cosa que debería normalizarse. Cuando le explicas a la gente que vas al psicólogo lo primero que te pregunta es: "¿Están bien? ¿Te pasa algo?" Para la vida y el deporte, la mente es lo que hace la diferencia. El año pasado por las circunstancias y cómo fueron las cosas, seguramente no rendí bien por el aspecto mental. Este año hemos intentado trabajar mucho sobre esto.

Con 14 años se fue a Sierra Nevada para seguir su progresión. Ahora que va a los Juegos sentirá que todo ese esfuerzo ha tenido una gran recompensa.

-En ese momento, cuando me fui, sentía que tenía que probar en el esquí. La única manera era tomármelo en serio y entré en el Centro de Tecnificación de Sierra Nevada. Han pasado muchos años y han sido años duros, pero poco a poco estoy recibiendo recompensa de resultados como poder ir a los Juegos Olímpicos. Es parte del camino y espero que todavía haya más ocasiones así. Si echo la vista atrás me siento orgulloso.

"No quiero pensar mucho en el resultado, lo que tengo que intentar es seguir con el nivel de las últimas carreras"

"En la vida y el deporte la mente es lo que hace la diferencia; ir al psicólogo debería normalizarse"

"Si echo la vista atrás me siento orgulloso; han sido años duros, pero estoy recibiendo recompensa"