ese a las últimas derrotas ligueras, el año 2021 de la Real Sociedad se puede considerar como excelso, sublime o cualquier otro calificativo que exprese con claridad el meritorio rendimiento ofrecido por el equipo txuri-urdin. La consecución de la Copa del Rey, después de casi 34 años de no adornar sus vitrinas con un título, ha posibilitado que la generación perdida de la afición realista, esa que nunca había visto levantar a su equipo un trofeo, se haya despojado de esta etiqueta de por vida. Por fin, el pasado 3 de abril en el estadio sevillano de La Cartuja, la Real se adjudicó la Copa, además en un derbi contra el Athletic (tras conseguir el 1-0 Mikel Oyarzabal de penalti), una gesta que ni el mayor de los forofos realzales podía haber imaginado antes. De la forma más deseada, además. Una imagen, a pesar de que la pandemia provocó que las gradas estuvieran vacías (la única pena del histórico hito), que quedará grabada para siempre en las retinas de los seguidores blanquiazules.

Este título de Copa, por tanto, corona un año 2021 en el que el proyecto ideado por Roberto Olabe se asienta y en el que su líder, Imanol Alguacil, el auténtico artífice de esta Real que tanto transmite a su afición, se ha ganado no solo al vestuario sino que también a todos y cada uno de los aficionados txuri-urdin. Es el capitán de una nave cuyo techo aún no se vislumbra.

Las últimas derrotas del año no empañan esta era dorada de una Real que también ha hecho disfrutar a un estadio de Anoeta que ha vivido su récord de asistencia (en el derbi frente al Athletic del pasado 31 de octubre, 1-1, con 37.066 espectadores). Un espectacular dato al que se une también el récord de abonados registrado por el club, 37.316, según el último dato ofrecido en la Junta General de Accionistas celebrada el pasado 14 de diciembre.

Clasificación europea

Al título copero hay que añadir el buen hacer de la Real en el campeonato doméstico, en el que acabó la temporada 2020-21 en una meritoria quinta posición que le otorgó, por segunda ocasión consecutiva, la clasificación europea para la Europa League. De este modo, Imanol se unió al selecto club de entrenadores, junto a los laureados Alberto Ormaetxea y John Toshack, ambos en la década de los 80, que han llevado a la Real dos veces seguidas a Europa.

En este año 2021 la Real también participó en el nuevo formato de la Supercopa, que tuvo lugar también en La Cartuja, y en la que una fatídica tanda de penaltis contra el Barça, con el fallo, entre otros, del infalible Oyarzabal (su primer error desde los once metros, tras haber convertido antes 17), dejó a los guipuzcoanos fuera de la final. A esta decepción habría que sumar la dolorosa eliminación europea ante el Manchester United (tras la goleada de 0-4 encajada en Turín). Y no hay que olvidar que tres realistas -Oyarzabal, Merino y Zubimendi- formaron parte de la selección española que obtuvo la plata olímpica en los Juegos de Tokio.

Meritorio ascenso del Sanse

Al glorioso 2021 del primer equipo txuri-urdin le acompañó el filial con su histórico ascenso a Segunda División 60 años después y erigiéndose, así, en el único filial de Primera División en la categoría de plata. Un hecho que habla bien a las claras del magnífico trabajo que se viene realizando en Zubieta, donde sus frutos se multiplican en los últimos tiempos. Xabi Alonso capitanea un barco que ahora está sufriendo para mantenerse a flote en una división muy competitiva pero que seguro que obtiene un buen rendimiento de aquí al final de temporada.

Y en el capítulo de la Real hay que destacar también la extraordinaria labor de su equipo femenino, que va camino de conseguir su primera clasificación europea (sería para la Champions League) tras firmar un brillante y prometedor primer tramo de competición. El conjunto dirigido por Natalia Arroyo, que ha renovado con éxito la plantilla tras la marcha de pesos pesados del vestuario, terminó el año como segundo en la Liga y apunta buenas maneras para superar su mejor clasificación, los quintos puestos logrados en la 2020-21 y en la 2015-16, esta última con Igor San Miguel al mando.