- La derrota del Acunsa Gipuzkoa Basket en Manresa deja al equipo guipuzcoano con pie y medio en la LEB Oro, obligado a ganar los tres partidos que le quedan, contra Baskonia, Unicaja y Andorra, además de depender de la derrota del Estudiantes en el encuentro que tiene pendiente y de que el Bilbao Basket no logre tres triunfos.

El Gipuzkoa Basket está virtualmente desahuciado de la ACB tras los malos resultados en dos meses decisivos en los que solo han conseguido dos triunfos en diez partidos y han dado una imagen de poca solvencia en la mayoría de ellos.

Ahora, con la plantilla más corta de la Liga ACB tras la lesión de su capitán, Xabi Oroz, y antes la del pívot colombiano Jaime Echenique, afrontan los últimos coletazos del calendario en precario y podrían descender este jueves si pierden ante el Baskonia (20.30 horas).

Matemáticamente sus opciones de permanencia pasarían por ganar los tres últimos encuentros de la liga regular, el primero de ellos el aplazado por los casos de coronavirus en el conjunto gasteiztarra que se juega entre semana, y esperar también una derrota estudiantil en el cierre de la liga.

El camino que probablemente le va a tocar transitar al GBC lo conoce bien ya que es el mismo al que se vio abocado hasta en cuatro ocasiones en los últimos diez años, dos veces con el descenso consumado y otros dos años en los que evitaron su caída por la imposibilidad de los equipos de la división de plata de aquel momento -Burgos, Alicante y Ourense- de ascender por las condiciones económicas que imperaban en la ACB.