- El Eibar, que hace 17 días logró por fin su primera victoria en casa de la temporada ante el Granada (2-0), vive inmerso en las dudas que le han dejado sus dos derrotas consecutivas, ante el Levante (2-1) en la Liga y la eliminación contra un equipo de Segunda B como el madrileño Navalcarnero (3-1) en la Copa del Rey. Por tanto, con la intención de que no empeore su situación y de alejarse de los unos puestos de descenso que ya tiene a solo dos puntos, el equipo armero necesita sorprender y puntuar ante el líder Atlético de Madrid, el equipo en mejor forma de la presente temporada.

José Luis Mendilibar confía en poder contar con su estrella ofensiva, el centrocampista de Barbate Bryan Gil, autor de los dos tantos ante el Granada y que no pudo ser alineado por lesión en los dos últimos partidos, precisamente en los que el Eibar cayó derrotado.

La visita del Atlético es una buena oportunidad para reivindicarse de la decepción copera, más con el precedente de hace un año, cuando le ganaron por 2-0, con tantos de Esteban Burgos y Edu Expósito, la única vez que se han impuesto al equipo de Diego Pablo Simeone en las siete visitas del conjunto colchonero.

Cote entrará en su primera convocatoria, mientras que Mendilibar tiene la duda de si Rafa Soares, que lleva ya varias semanas en el dique seco, podría tener sus minutos.

La semana ha sido movida para el club armero, que ha colocado en el mercado de invierno a sus jugadores Roberto Olabe, que se ha marchado cedido al Tondela de la liga portuguesa, y al polaco Damian Kadzior, que lo ha hecho al Alanayaspor de la turca. Por contra, ha fichado al centrocampista catalán Aleix García, aunque su presencia en el partido de hoy se antoja prematura.

El rival

El Atlético de Madrid aspira a seguir aumentando su ventaja con sus rivales en la pugna por el título liguero; un triunfo le colocaría con siete puntos sobre el Real Madrid y diez sobre el Barcelona.

La oportunidad para ampliar la distancia sobre sus estos dos adversarios -que ya disputaron esta jornada de forma anticipada por la Supercopa- es el gran estímulo del líder, asentado en su nueva efectividad como visitante -ha ganado en cinco de sus siete visitas este año, con solo un empate ante el Huesca y una derrota ante el Real Madrid- después de haber tenido ocho días de descanso, algo muy poco habitual en el fútbol pospandémico.

Un asalto al territorio armero que no será sencillo porque el conjunto rojiblanco llega con bajas muy sensibles en su alineación. El capitán Koke está sancionado después de haber recibido su quinta tarjeta amarilla en la victoria ante el Sevilla (2-0); en ese mismo partido se lesionó el central Hermoso con un esguince de tobillo; y la FIFA decidió ratificar la sanción al lateral inglés Trippier por incumplir el reglamento sobre apuestas de la Federación Inglesa, por lo que no podrá jugar hasta el 28 de febrero, si no media antes el TAS.

Los sustitutos, según el entrenamiento del martes, serían Saúl en el centro, de vuelta al once seis jornadas después y que espera que su gol al Sevilla sea el primer paso para dejar atrás un delicado momento anímico y futbolístico; el brasileño Felipe, en la defensa; y el croata Vrsaljko, por la derecha.