Sufrimiento con premio
Mano Ezkurdia, vigente campeón del Cuatro y Medio de la LEP.M, alcanza de nuevo la final de la ‘Jaula’ al imponerse a Jaka en un vibrante encuentro disputado en un abarrotado Labrit
Duración 55:31 minutos.
Saques 3 de Ezkurdia (tantos 8, 14 y 15) y 3 de Jaka (tantos 2, 4 y 9).
Pelotazos 303.
Tantos en juego 9 de Ezkurdia y 11 de Jaka.
Errores 5 de Ezkurdia y 8 de Jaka.
Marcador 1-0, 2-1, 2-2, 3-2, 4-3, 4-4, 5-4, 5-5, 6-5, 12-6, 13-6, 15-7, 16-7, 17-8, 18-11, 18-12, 19-12, 19-13, 19-14, 20-16, 21-17 y 22-20.
Incidencias Primera semifinal del Cuatro y Medio de la LEP.M disputado en el frontón Labrit de Pamplona. Lleno, con aproximadamente un millar de espectadores. En el partido que abrió la función, Olaizola II e Imaz ganaron a Víctor y Albisu (22-16). En el que la cerró, Arteaga II e Iturriaga pudieron con Bakaikoa y Eskiroz (18-15).
Pamplona - El Labrit de Pamplona, engalanado, puso en juego el primero de los dos billetes para la gran final del Cuatro y Medio de la LEP.M en un partido que medía al vigente campeón de la distancia, Joseba Ezkurdia, con un novato en el asalto previo a la lucha por la txapela como Erik Jaka, quien a punto estuvo de firmar una remontada para el recuerdo. Se quedó a medio camino, sin embargo, el de Lizartza, inagotable, pero derrotado finalmente por un ajustado 22-20.
Les costó a ambos contendientes acomodarse en la cancha y tomar el pulso a la semifinal, que encandiló a los asistentes al Labrit en una tarde apasionante en la que la temperatura fue en aumento. Los errores y las imprecisiones, no en vano, se sucedieron hasta el 5-5, que apuntó a significar el principio del fin para Jaka, que se mostraba atado de manos en una cita de máxima trascendencia a la que Ezkurdia fue el primero en abrazarse con decisión. El navarro, pura fuerza de la naturaleza, hizo valer su experiencia para adquirir una paulatina y creciente ventaja que acabó resultando definitiva. Escaló el de Arbizu hasta el 12-5 para alcanzar en un abrir y cerrar de ojos el 15-6 con un demoledor parcial de 10-1. A Jaka, superado por los acontecimientos, parecían faltarle piernas y aire, pero nada más lejos de la realidad.
El guipuzcoano, todo pundonor ayer, solo necesitaba poner en orden sus emociones y desatarse de pies y manos, lo cual consiguió hacer cuando el luminoso reflejó un 17-7 en su contra que celebró con cautela un lanzado Ezkurdia. Sabedor de la importancia de cerrar el envite, el de Arbizu se puso manos a la obra, pero le alcanzó un ciclón llamado Jaka. En medio de la paz, emergió la tormenta. El de Lizartza se agarró con uñas y dientes a la semifinal para ir desgastando física y mentalmente a Ezkurdia a base de pelea y acierto en el remate.
Otro partido Nació entonces, con el 17-7, una nueva contienda en la que Jaka, sin nada que perder ya, se lanzó a por la remontada sin paracaídas. Con un parcial de 9-2 logró acercarse hasta un 19-16 que, con un tanto entre medias que finalizaron ambos pelotaris tumbados en la cancha, puso por primera vez contra las cuerdas al vigente campeón, que reaccionó de inmediato para alcanzar el cartón 21 con cinco tantos de diferencia. Pero su adversario, incansable, no había dicho aún su última palabra.
Un último parcial azul de 4-0, con Ezkurdia cada vez más cansado en todos los aspectos, puso el 21-20 en el electrónico y la final al alcance de dos auténticos guerreros, consiguiendo el de Arbizu besar la gloria con un definitivo tanto que le catapulta a una nueva final en la que tratará de revalidar su txapela en la jaula.