donostia - El rugby femenino sigue creciendo en Euskadi. Ordizia y Bera Bera han conseguido consolidar sendos equipos esta temporada y, tras varios meses de entrenamiento, ambos conjuntos comenzarán a disputar la Liga Vasca que arranca este fin de semana. Goierritarras y ordiziarras, además, jugarán en el grupo B de la competición junto al Gernika y La Rioja, otros dos conjuntos que han debutado durante esta campaña. Vizcainas y riojanas, no obstante, tienen más experiencia que las guipuzcoanas, puesto que ya han participado en el Torneo Amaiur que finalizó la semana pasada.
La aparición del Orkli Ordizia y del AVK Bera Bera multiplica por dos los equipos femeninos absolutos en Gipuzkoa. Los dos debutantes se suman a la presencia del Avia Eibar y del Hernani, más consolidados, que competirán en el otro grupo de la Liga Vasca junto a La Única, Gaztedi y un combinado compuesto por jugadoras de Durango, Uribealdea y Zornotza. El campeón de la primera vuelta entre estos conjuntos peleará por el ascenso a la División de Honor B.
Ante la escasez de jugadoras, tanto el Orkli Ordizia como el AVK Bera Bera jugarán al principio con doce jugadoras titulares. De momento, el objetivo de los dos equipos será seguir aprendiendo y disfrutando del rugby.
Una vieja aspiración hecha realidad
La creación de un equipo femenino ha sido un sueño hecho realidad para el Ordizia. A lo largo de los últimos años, bajo diferentes directivas, el club de Goierri había realizado varios intentos para relanzar el rugby entre las mujeres y para recoger así el testigo de las pioneras que practicaron el rugby en Trevijano en los años 80, pero hasta ahora estas iniciativas no habían tenido éxito.
Ianire Herzog también ha tenido que esperar hasta este curso para poder disfrutar del balón oval: “Siempre me ha gustado el rugby. Ordizia siempre ha sido un lugar donde este deporte ha estado muy presente, y siempre ha habido mucho ambiente. Hace unos años también hubo un intento de sacar equipo. Nos acercamos ocho personas y no fuimos suficientes. Hace unos meses, cuando vi el rugby a siete en los Juegos Olímpicos, me atrajo mucho y me dio también un poco de envidia. Pensé en probar de nuevo. Le comenté a mi antiguo entrenador, Iker Korta, a ver si iba a haber otro intento para crear un equipo. Me dijo que sí y me presenté en Altamira”.
La medio melé ordiziarra, de 17 años, ya había tenido antes un contacto previo con este deporte, pero le supo a poco: “Hubo unas clases de rugby en la ikastola -Jakintza- en la que vinieron unos jugadores y nos entrenaron un poco. No era rugby del todo, pero estaba bien”.
El Ordizia ha reunido sobre todo a jugadoras de estas localidad -seis- y de Beasain -otras seis-, pero también han llegado deportistas de Zarautz, Azpeitia, Errenteria, Zegama, Gabiria, Zumarraga, Idiazabal... e incluso una estadounidense que trabaja en Zaldibia. La menor de ellas tiene 15 años y la mayor 24. La mayoría no había jugado anteriormente a este deporte, y otras como Lide Erbina ya han jugado con la selección vasca de seven.
El encargado de instruir a las jugadoras ha sido el pilier argentino Agustín Ortiz, que contó con la ayuda de otro jugador del primer equipo, el sudafricano Christian Rust. Además, la olímpica Amaia Erbina -hermana de Lide- también ha colaborado con una clase magistral. El equipo se entrena miércoles y viernes en Altamira, a las 18.00 y a las 18.30 horas, y sigue abierto a la incorporación de nuevas jugadoras.
Herzog espera “con ganas” el debut en la Liga Vasca, que se producirá mañana en Altamira frente al Gernika (13.30 horas).
“La espinita de aprender a jugar”
El AVK Bera Bera también ha conseguido este curso sacar adelante un equipo femenino. Para una de sus integrantes, Mónica Azpitarte, jugar por fin a un deporte que ha conocido toda su vida será “una satisfacción”. “Mi aita -el directivo del club Ángel Azpitarte- jugó un montón de años, mis dos hermanos juegan y siempre hemos visto sus partidos. Ahora, mi hermana Nerea y yo podemos jugar en este equipo. Siempre habíamos tenido esa ilusión”. Precisamente, Ángel Azpitarte tuvo un papel decisivo en la creación de este conjunto: “Mi aita se empeñó en sacar un equipo femenino y al final conseguimos reunir a un grupo de chicas dispuestas a aprender y a jugar. Ahí empezó todo”.
La apertura donostiarra, de 21 años, jugó “en la rugby eskola. Pero llegué a una edad en la que no había más chicas. Poco a poco, las demás jugadoras lo fueron dejando, no había ningún equipo femenino cerca y yo también acabé dejándolo”.
Cuando el Bera Bera formó el equipo, Azpitarte jugaba a fútbol, aunque seguía pensando en practicar el rugby: “Tenía la espinita de querer aprender a jugar a rugby, y era una pena que no lo pudiera practicar porque no había equipo femenino. Ahora estamos con mucha ilusión. Por fin lo hemos conseguido y quiero aprender lo más posible”.
Actualmente, el Bera Bera tiene ya unas “veinte jugadoras. Hay una que viene de Bergara, pero casi todas somos de Donostia. Hay una chica que jugó en el Hernani y otra que jugó en el Atlético hace unos años, pero, en general, la mayoría no ha jugado antes a rugby. Algunas venían de otros deportes y otras no. En realidad, hemos empezado todas de cero”. Las edades de la plantilla van desde los 14 años hasta los 40 años de una jugadora que tiene dos hijos en la rugby eskola, pero la mayoría de integrantes del Bera Bera tienen entre 20 y 25 años. Lalo Alfonso es el entrenador del equipo, pero, como en el caso del Ordizia, también han acudido a los entrenamientos jugadores olímpicos como Ignacio Martín y Pablo Feijóo para impartir sus conocimientos. Azpitarte subraya que el equipo femenino “ha recibido mucha ayuda por parte del club y de los jugadores de los equipos masculinos. Han estado apoyándonos desde el principio”.
El Bera Bera no debutará este fin de semana, sino que tendrá que esperar hasta el día 28 para jugar frente a La Rioja. La apertura donostiarra confiesa que todas tienen “muchas ganas de jugar. Hemos disputado algún partido amistoso, pero nos lo hemos tomado como un entrenamiento para aprender. Estar en una competición te da otra motivación”.
“Aprender y disfrutar” en la Liga Vasca
Herzog y Azpitarte coinciden en marcarse dos objetivos para esta Liga Vasca: “Aprender y disfrutar”.
La medio melé ordiziarra ha descubierto que “jugar al rugby es una gozada. Igual uno que lo ve desde fuera piensa que es una salvajada, pero cuando lo juegas es diferente. Si te gusta, no te importa recibir una leche o un placaje. Disfrutas del juego. Además, como es un deporte de equipo y necesitas la ayuda de los demás, estás más unida al equipo. También está el tercer tiempo. Ahí se crea una atmósfera de amistad, y eso también atrae. No es solo jugar contra los rivales y a casa. Tienes tiempo para tener contacto con los del otro equipo, hacer nuevos amigos, contar experiencias... Al final, el que juega a rugby tiene otro sentimiento sobre este deporte, si no, no le merece la pena recibir tantos golpes o correr el peligro de lesionarse”. Herzog es consciente de que “la gente todavía es nueva” y que ahora en la Liga Vasca toca “aprender, pasarlo bien y hacer amigos”.
Azpitarte, a su vez, ha encontrado en el rugby “un deporte muy divertido. No necesita tanta resistencia como en otros deportes, porque hay muchos contactos y el juego se para mucho. Eso te sube mucho la adrenalina. Y en el campo no sientes dolor. Creo que nos está encantando a todas. La mayoría que han venido a entrenar se han enganchado. Es un deporte que puede gustar a cualquiera, y hay gente de todo tipo”.
La apertura del AVK Bera Bera espera “aprender y disfrutar de los partidos. Queremos poner en práctica lo que nos han enseñado hasta ahora y, poco a poco, subir nuestro nivel”. Azpitarte admite que tiene “ganas” de enfrentarse al Ordizia, pero no porque tengan una rivalidad especial con sus jugadoras: “Cuando empezamos, jugamos un partido contra ellas y se notaba que jugaban más que nosotras. Quiero enfrentarme otra vez a ellas para ver nuestra evolución, pero todavía no tenemos un pique con ningún equipo y, de hecho, estamos contentas de que haya más rivales para poder jugar con ellos. Y cada vez que surja uno nuevo será bueno para nosotras”.