donostia - El estado físico de Taquan Dean es el mayor quebradero de cabeza del Gipuzkoa Basket de cara al duelo de mañana contra el CAI Zaragoza en Illunbe (12.15 horas). El escolta estadounidense, que promedia 13,5 puntos por partido, está con fiebre y es duda de cara al encuentro contra los maños. “Ayer (por el jueves) estaba con más fiebre que el miércoles y no sabemos cómo va a estar. A ver si lo recuperamos”, comentó ayer en rueda de prensa Jaume Ponsarnau.

Jordi Grimau y Mikel Motos siguen de baja, aunque el catalán quizás haga la rueda de calentamiento, por lo que la ausencia de Taquan Dean sería un problema. “Es el anotador y nosotros hemos mostrado fisuras en la anotación. Sería un hándicap no tenerlo”, reconoce Ponsarnau, que en cualquier caso recordó el buen hacer del equipo cuando Dean fue expulsado en Fuenlabrada: “Si no lo recuperamos tendremos que hacer como ese día, cuando otros jugadores tuvieron que tomar responsabilidades anotadoras y lo hicieron muy bien”.

Dejando a un lado los problemas físicos de los citados jugadores, el GBC está en su mejor momento de la temporada gracias a sus tres triunfos en las cuatro últimas jornadas. “Los entrenadores no queremos que tu nivel competitivo dependa de las rachas, pero es cierto que ahora estamos con confianza en nuestra defensa y en cómo queremos atacar”, comenta el técnico catalán, que no quiere que su equipo se relaje por los dos triunfos de renta que tiene sobre la zona de descenso: “Desde el principio hemos querido estar centrados en ganar partidos, no en mirar la clasificación. No queremos que la situación actual nos dé confianza, porque puede haber un momento en el que no estemos tan bien y no queremos que eso provoque desconfianza”.

La mejoría reciente del equipo ha venido unida a un crecimiento de jugadores como Jared Jordan (segundo máximo asistente de la ACB), Dani Díez (máximo reboteador) o el propio Dean (cuarto mejor anotador): “Hemos ajustado cosas para que las virtudes de nuestros jugadores luzcan más. Por ejemplo nadie dudaba de Taquan. Sus porcentajes de inicio de temporada no eran lógicos, pero hay que tener en cuenta que no competía desde febrero. Ser paciente no es solo esperar, sino mostrar confianza”.

el cai se juega la copa El entrenador del GBC alabó el potencial del contrincante de mañana, el CAI, sobre todo en la posición de ala-pívot, donde cuenta con dos jugadores del nivel de Jelovac y Marcus Landry, pero espera aprovechar el hecho de que se esté jugando entrar en la Copa: “Su nivel de tensión será más alto, aunque sabe que si gana se mete. Va a dar el 100%. Esperemos que sus dos cuatros no dominen el partido porque son jugadores con puntos y que generan juego”.

Ponsarnau agradeció las palabras de elogio que le había dedicado el presidente el día anterior: “Cuando se reconoce tu trabajo te sientes mucho mejor, siempre y cuando no cometas el error de relajarte. Mi compromiso es no relajarme”.