fernando Alonso se ha convertido en el empujón y líder de un equipo que necesita de personas con carisma. En este sentido, el asturiano se está echando encima mucha responsabilidad. En ocasiones critica públicamente al equipo técnico si no consigue progresos en el coche, y también transmite la pasión y fuerza al aficionado con frases como la que terminó en el pasado Gran Premio de India: "Nunca nos rendiremos". A mí, desde luego, sí que me ocurre. Se merece el campeonato.
No quiero quitarle méritos a Sebastian Vettel, por supuesto, ya que normalmente no comete fallos cuando el coche va bien. Pero le atribuyo más mérito a la remontada de Alonso que a las vueltas en solitario del alemán. Eso sí, puedo asegurar que los ingenieros se están devanando los sesos para mejorar el coche. De lo contrario, McLaren quedaría por delante. Concretamente, la semana pasada estuvieron en una pista que conozco, Idiada, en Tarragona. Es una pista de pruebas en la que se realizan tanto probaturas de Fórmula 1, investigación de vehículos, como pruebas de coches comerciales? es una joya nacional. Además, la escudería ha incorporado algunas piezas nuevas en el coche de Felipe Massa durante alguna carrera a modo de test de prueba. No hay que olvidar que la Fórmula 1 es un deporte de equipo, y yo lo veo bien así. Esta práctica no es antiética ni nada, si no que se lo digan a Red Bull, que también ha solido probar actualizaciones en su escudería hermana, Toro Rosso, y a veces con resultados nefastos. Me viene a la memoria una sospechosa avería de Sebastian Buemi en 2010 rompiendo la suspensión delantera de una manera muy agresiva.
A estas alturas de la temporada es cuando el departamento aerodinámico de los equipos está en plena ebullición, pero también para diseñar el coche de la próxima temporada. El 80% de las piezas aproximadamente se hacen durante la campaña anterior. De hecho, el que escribe pidió permiso para visitar el Centro Tecnológico de McLaren y le fue denegado. No es cuestión de dar muchas pistas de cara a la próxima temporada.
Ya que he sacado el tema, voy a seguir con McLaren, y es que su relación con Mercedes está muy deteriorada. Actualmente, la marca alemana es su motorista, pero los ingleses han soltado esta perla: "De ninguna manera seguiremos siendo clientes de Mercedes". Mucho tiene que ver la salida de Lewis Hamilton, pero también salpica a esta relación la construcción del modelo de calle, McLaren F1, que se diseñó a medias entre Mercedes y McLaren. Fue un superdeportivo que aspiraba a crear escuela, que finalmente fue superado por otros coches más asequibles y no se vendió tan bien como se esperaba. Además, Mercedes está teniendo problemas y se ha planteado su continuidad en el Gran Circo. En Alemania pesan mucho los sindicatos, y no le ven mucho sentido a andar con despidos y luego invertir una millonada en la Fórmula 1. Para 2013, desde luego, yo no veo a Hamilton de campeón del mundo, ya que a día de hoy Mercedes es peor equipo que los tres de cabeza.
La viabilidad de los equipos de Fórmula 1 es un tema peliagudo. Depende si detrás de ti hay un gran fabricante, como en el caso de Ferrari o Mercedes, o si eres un equipo de carreras, como Williams o Sauber.
Mis amigos están convencidos de que este negocio no es rentable, que Ferrari sale todos los años perdiendo dinero. A mí eso no me parece posible y creo que ya se habría cerrado el chiringuito si eso persistiera. Según Antonio Mesquida, uno de los mayores expertos sobre patrocinios de Fórmula 1, si los esponsors no son capaces de llevar entre cinco y siete millones de libras al año durante tres años, mejor ni se habla. Por otro lado, también existe el famoso Pacto de la Concordia, que rige la manera en la que se reparten los derechos comerciales de la Fórmula 1 entre Bernie Ecclestone, los equipos y la FIA. Este pacto está a punto de renovarse en los próximos días.