La embarcación pasaitarra tratará de plantar cara a las embarcaciones vizcaínas de Kaiku y Urdaibai y los cántabros de Astillero, favoritas a priori, y aprovechar de paso para llevarse la sustanciosa recompensa de casi 4.000 euros, en una regata que reparte más de 22.000 entre las 12 participantes.

Ésta será la conformación de una tanda de honor inesperada a principios de temporada, sobre todo por la ausencia de Orio y la presencia de Astillero, porque ya se presumía que el nivel de Kaiku iría "in crescendo" según pudiera alinear como propios a grandes figuras del remo que ya llevan bogando algunas temporadas en el club de Sestao.

La prueba se presenta apasionante porque va a ser una de las más técnicas de todo el campeonato con el campo de regateo en el interior de la bahía, aguas tranquilas a priori, pero que exigirá un esfuerzo de pericia en las sucesivas ciabogas, hasta cinco, que puede ser determinante para el triunfo final.

Se espera, si el tiempo acompaña, una gran presencia de aficionados por la cercanía de Hondarribia, Orio o Zumaia, además de los seguidores que aporta el otro Pasaia, San Pedro, que puede ser también el gran benefiiado de un campo de regateo diseñado por el propio club, que es el encargado de organizar esta bandera.