La crisis de derrotas del Lagun Aro GBC a lo largo de los meses de enero, febrero y marzo obligó a un cambio de rumbo. Aquel equipo que comenzó la liga destacando por su alegre ataque y que llegó a pelear por la Copa del Rey fue perdiendo poco a poco su brillo y Pablo Laso ha tenido que reinventar su equipo, que en los dos últimos partidos ha mostrado una nueva versión, más equilibrada, sin tanta dependencia de las figuras y con una mayor participación de los teóricos secundarios. Éstas son las tres claves del Lagun Aro, versión 2.0.
Menos puntos en contra
Más concentración e intensidad en defensa
El equipo de Laso ha mejorado mucho su defensa en los dos últimos partidos respecto a todos los de los tres primeros meses del año, y ha sido capaz de dejar en 70 puntos al DKV Joventut y en 74 al Estudiantes, dos equipos con un importante arsenal ofensivo. Para ello, el técnico vitoriano ha optado por dar más minutos a jugadores como Uriz, Detrick y Hopkins, que dan más equilibrio al equipo. De hecho, los tres han sido titulares en las últimas citas junto a Panko y Doblas. Barbour e Ignerski están jugando algo menos, porque la defensa no es su fuerte, mientras que Sergio apenas jugó cuatro minutos contra su ex equipo. Además, Rai ha vuelto a las rotaciones por su labor de desgaste sobre los bases rivales. El resultado, a la vista está, es bueno.
Cambios en el base
Uriz se hace con la titularidad
La principal novedad en las últimas semanas ha sido la titularidad de Ricardo Uriz, cuyo trabajo ha convencido a Laso y que ha explotado definitivamente en las dos últimas semanas, con una impresionante actuación ante el Joventut y un buen partido en Madrid. El equilibrio que da al equipo tanto en ataque como en defensa ha hecho olvidar a Sergio, que ha pasado de titular a tercer base. En los dos últimos choques, el capitán ha ganado la partida a los bases rivales, ha liderado al equipo desde la defensa, ha dirigido con acierto el ataque -ha repartido un total de quince asistencias- y ha aportado puntos. Su único lunar, alguna pérdida de balón evitable.
Puntos de Uriz, Lorbek, Miralles...
Anotación más repartida
En la primera vuelta, el conjunto guipuzcoano dependió en exceso de los puntos de su tridente ofensivo, formado por Antwain Barbour, Andy Panko y Michal Ignerski. Entre los tres llegaron a promediar más de 40 puntos por partido, lo cual sirvió para lograr muchos triunfos, pero que se volvió en contra del equipo cuando el rendimiento de estos jugadores empezó a bajar, especialmente el de Barbour.
En los dos últimos encuentros, el Lagun Aro ha logrado repartir más la anotación. Contra el Joventut, entre Ignerski, Panko y Barbour apenas aportaron 25 tantos, pero surgieron Uriz (18 puntos) y Detrick (10). Además, Doblas y Miralles metieron 9 cada uno y Hopkins, 7. Contra el Estudiantes, el tridente metió 34 puntos, pero los máximos anotadores fueron Miralles y Lorbek, con 14 cada uno.