Miren Arzalluz sabe, y mucho, de la obra de Cristóbal Balenciaga. Entre 2006 y 2013 fue responsable de colección y exposiciones de la Fundación que lleva el nombre del insigne diseñador y modisto de Getaria.
¿Quién mejor para defender sobre una pasarela el arte de Balenciaga en la Semana de la Moda de París que quien es considerada como la mayor experta mundial en su obra? La que hoy por hoy es directora del Palais Galliera, responsabilidad que asume desde enero de 2018, ofició como exclusiva modelo de la marca.
El que es director creativo de Balenciaga desde 2015, Demna Gvasalia, contó con Arzalluz para mostrar sobre las tablas de la moda de París su propuesta de trajes excesivos y hombreras casi descomunales.
Pero Arzalluz no fue la única que compitió el pasado domingo en elegancia con las modelos profesionales en el desfile dirigido por Demna, que también contó con su madre y su novio para desfilar en la capital de Francia.
Arzalluz se mostró segura en esta experiencia como modelo. No puede ser menos, porque la autora del libro Cristobal Balenciaga: La forja de un maestro, a buen seguro que conocerá muy de cerca los secretos de los diseños del que hoy en día lleva la batuta de la marca.