Los problemas de salud derivados de un covid persistente han obligado a Idoya Otegui a dar un paso al lado y dejar la dirección del Museo y Centro Internacional de la Marioneta de Tolosa, Topic. Su testigo lo han cogido dos caras nuevas con amplia experiencia en la creación y la pedagogía de espectáculos con marionetas y objetos, Estitxu Zaldua y Juanjo Herrero, quienes codirigirán el espacio con dos claros objetivos: continuar en su internacionalización y ampliar su oferta formativa y educacional.

¿Cómo les llegó la invitación para dirigir el centro?

–Estitxu Zaldua: Conocimos el Topic el noviembre pasado al venir con la escuela de arte dramático Dantzerti a unas jornadas de profesionalización y pedagogía del titiritero. En ese momento, Idoia ya se encontraba enferma y Xabier Ormazabal estaba sustituyéndola. A final de curso, en junio, nos contactaron para conocer más nuestro perfil y se nos propuso la dirección.

Antes de esas jornadas, ¿conocían el Topic?

–Juanjo Herrero: Estitxu y yo nos conocimos en el Institut del Teatre de Barcelona y uno de los profesores que impartía la asignatura de títeres y construcción, Alfred Casas, nos dijo que se iba a inaugurar. Nos acercamos a él sobre el 2013 y conocimos el centro como unos turistas más. 

–E.Z.: Fue con las jornadas cuando vimos realmente todo lo que había detrás. Con los años, el Topic ha ido sumando actividades y notamos una gran diferencia entre esa primera visita y la del pasado año. Aún así, ha sido ahora cuando hemos visto en realidad todo lo que hay (risas).

¿La decisión del cambio tiene también que ver con buscar un relevo generacional?

–J.H.: Nos da la sensación de que sí. El Topic es lo que es, que no es poco, y es un trabajo que hay que mantener, algo que no es sencillo, pero el objetivo que nos ha transmitido Idoia es el de seguir creciendo. Una de las cosas que le interesaba, por ejemplo, era la pedagogía. Poder formar realmente parte y que el Topic pueda albergar una escuela de profesionalización. Hay mucho trabajo hecho en lo que se refiere a la pedagogía para primaria y cuenta con cursos para profesionales que funcionan muy bien, pero falta tener una formación más reglada. 

–E.Z.: También se ha hecho mucho trabajo en la internacionalización y el Topic cuenta con un prestigio que hay que seguir labrando. Este año, además, se han unido la pedagogía y la internacionalización en un Erasmus+ que busca la formación de titiriteros a nivel europeo. 

Se van a repartir las tareas y esa labor de internacionalización va a recaer en usted, ¿verdad?

–E.Z.: Exactamente. Juanjo será la persona referente en el día a día y yo, como también soy profesora en Dantzerti, estaré colaborando y asesorando en toda la parte internacional, que pedagógicamente queremos seguir desarrollando. 

–J.H.: Mi labor será que el equipo del Topic, humilde en cuanto a número, quince personas, siga desarrollando las diferentes parcelas que tiene a lo largo del año. El día a día tiene un ritmo y unas peculiaridades que hay que mantener. 

¿Sigue haciendo falta mucha pedagogía para que la población deje de asociar el títere únicamente con lo infantil? 

–J.H.: Hay que ser conscientes de que el títere es la puerta al teatro para los niños. Eso no hay que perderlo de vista, pero tampoco hay que quedarse anclado en ello. Uno de los objetivos con la pedagogía es subir un escalón y llevar esa formación a secundaria, a adolescentes y a adultos que quieran formar una compañía. 

–E.Z.: Hablamos de títeres, pero también cabe recalcar que el Topic apuesta por ser un museo de títeres y de objetos. Queremos dar cabida a propuestas que tengan una mira más hacia un público más adulto. 

–J.H.: El Topic tiene que ser un centro que eduque al público en cómo poder ver y disfrutar de un espectáculo de títeres y objetos. Que los adultos tengan la capacidad de decir que ha habido algo que les ha gustado.

–E.Z.: Esto también responde a una regeneración. Quizás todavía hay una imagen antigua de un estilo de títere y nuestro reto debe ser dar a conocer qué es la marioneta contemporánea. 

¿El Topic es conocido por las compañías de fuera?

–E.Z.: Sí. El trabajazo que hay hecho a nivel internacional y el material que tiene el museo está muy bien considerado desde el extranjero. En las pocas semanas que llevamos nos hemos dado cuenta de que quizás se aprecia más desde fuera lo que tenemos (risas).

–J.H.: Hay también que subrayar que el Topic es el único centro europeo que se dedica íntegramente al arte de la marioneta. Igual que el circo es una disciplina que está muy bien considerada en países como Canadá, Francia e Italia, con un apoyo institucional y cultural muy grande, a nivel estatal el arte del títere, como muchas otras disciplinas, no tanto. Ha tenido que ensanchar los codos y hacer su espacio. Por eso, otro de los objetivos es tejer una red más sólida a nivel estatal y poder darnos de la mano con otras instituciones y Comunidades Autónomas. 

¿Echan en falta un mayor apoyo institucional?

–J.H.: Estamos en momentos complicados. El Topic se inauguró en el 2009, así que ya de por sí no nace en un periodo acomodado y tranquilo. Comparándonos con otros países, sí que es verdad que hay más dificultades, pero no solo económicas y administrativas. Poder, por ejemplo, luchar para que haya una formación reglada del arte del títere te implica hacer un mayor esfuerzo para que te reconozcan. 

–E.Z.: La cultura en otros países es una mirada más amplia y tiene mayor soporte económico, por lo que el arte de la marioneta necesita hacerse ver dentro del propio teatro.

A pesar de ello, la tradición de las compañías vascas con el títere es muy grande y todos los años, como este con Anita Maravillas, hay un espectáculo nominado a los premios Max.

–E.Z.: Sí. Gracias a la comunidad que crean las propias compañías la visibilidad se va a ampliando. No queremos ser pesimistas para nada y creemos que hay una vía. Las propias escuelas de teatro van formando a nuevos artistas y van surgiendo nuevas creaciones, a pesar de que aquí no ha habido una escuela superior. Todo ello puede beneficiar mucho a la sociedad.

–J.H.: Es también prestar atención a lo que pasa. Cuando se inauguró hace 40 años el Titirijai, el Festival Internacional de Títeres, en Euskadi no estaba arraigado un teatro de títeres. A día de hoy, hay compañías como Anita Maravillas, Markeliñe, Gorakada, Taun Taun y muchas más. Ellas nos enriquecen a nosotros y nosotros a ellas. Tenemos que conseguir que si una persona de Euskadi quiere formarse en el mundo del títere, tenga la posibilidad de hacerlo desde aquí.

¿Cómo es la relación con el público de Gipuzkoa? Da la sensación de que si algo no está en Donostia, es complicado darse a conocer. 

–E.Z.: (Risas) Otro de los retos es expandirnos y que no todo se quede únicamente en Tolosaldea. Queremos abrirnos y tener más lazos fuera de Tolosa. La tendencia es que todo tiene que estar o en Donostia, o en Bilbao o en Gasteiz, pero también hay que hacer un trabajo para llevar la cultura a otros municipios. 

–J.H.: Hay que mantener un pequeño circuito, porque yo, aunque acabamos de aterrizar, tengo la sensación de que parece que más allá de las fronteras, sean estas de Donostia o de Bilbao, no hay nada. Creo que responde a esa educación. Si el público no reconoce algo, no entiende para qué hacen falta profesionales de ese medio. Tiene que ser un trabajo bidireccional que hay que tocar mucho más en el futuro.