- Los donostiarras Ursula Strong y Koldo Soret son Niña Coyote eta Chico Tornado y, ahora, también Don Condor eta Ñora Alacrán. Lo que empezó como una broma sobre cómo se llamarían en el caso de convertirse en banda de cumbia ha ido evolucionando hasta su cuarto disco de estudio, Niña Coyote eta Chico Tornado vs Don Condor eta Ñora Alacrán, un trabajo dividido en siete temas de su power rock característico y otros tantos de su especial fusión de cumbia en la que tienen cabida acordeones y bertsos. "No tenemos ningún tipo de atadura", aseguran. Y así queda en evidencia con un trabajo que vio ayer la luz y que en lo referente a Niña Coyote eta Chico Tornado mostrarán a lo largo de las próximas semanas con numerosas citas. Para ver en directo a Don Condor eta Ñora Alacrán, no obstante, habrá que esperar algo más.
Pregunta obligada, ¿de dónde salen Don Condor eta Ñora Alacrán?
-Koldo Soret: La idea surge en 2016, durante una gira en México cuando escuchábamos mucha cumbia en garitos de allí.
-Ursula Strong: También tocamos en un festival donde pinchaban cumbia electrónica y vimos que encajaba muy bien con la escena rock. Todo se mezclaba muy guay. La cumbia ya nos gustaba de antes y empezamos a bromear con que algún día haríamos una banda de cumbia.
Cuando anunciaron el disco, muchos medios pensamos que se habían unido a otra formación.
-K.S.: Sí, al principio no queríamos desvelar quienes eran Don Condor eta Ñora Alacrán y entramos en ese juego de que íbamos a sacar un disco compartido con otra banda.
-U.S.: Nos inventamos los nombres en México y se quedó en standby hasta el año pasado, en el que tuvimos más tiempo para crear una colección de temas que para cuando nos habíamos dado cuenta ya teníamos para un disco. Lo que pasa es que nos parecía que sacarlos con el nombre de Niña Coyote eta Chico Tornado era mucho cambio y recuperamos esa banda ficticia de cumbia que nos habíamos inventado y aquí está el resultado (risas).
-K.S.: Al principio solo era un chiste. En realidad nunca imaginábamos que íbamos a sacar un álbum con Don Condor eta Ñora Alacrán, pero nos motivaba el hecho de no sacar otro disco más de Niña Coyote eta Chico Tornado y hacer algo diferente. Tampoco tenemos ningún tipo de atadura, así que podíamos hacer lo que quisiéramos.
Aún así, el disco está dividido en dos caras. Una más reconocible con su trayectoria anterior y otra ya ligada a la cumbia.
-K.S.: Sí. De hecho, tanto el vinilo como el CD va en dos partes, una firmada por cada formación. Son siete canciones de cada, por lo que quien quiera rock lo va a tener y quien quiera la cumbia también.
Hablan de cumbia, pero en realidad lo presentan como cumbia surf. ¿Qué es?
-K.S.: (Risas) El nombre lo hemos puesto nosotros. Más que nada porque es a lo que nos recuerda. Sí que tiene la base rítmica de la cumbia, su percusión, los cencerros, las congas, el bajo... pero las guitarras son muy surferas.
-U.S.: No es cumbia tradicional. Es una mezcla un poco rara (risas).
En esa cara B han incluso desplazado la batería, que era una seña de identidad suya.
-K.S.: La grabación del disco ha sido un juego para nosotros. Incluso investigando y desgranando otras canciones del estilo que nos gustan. Pero al final ha sido darle nuestro toque.
Han llegado a incorporar hasta el acordeón. Son más intrumentalistas que nunca, y eso era algo muy difícil viniendo de ustedes.
-U.S.: Todos los instrumentos que tenemos en casa ya están utilizados (risas). Tendríamos que comprar nuevos para seguir probando.
-K.S.: El acordeón se utiliza mucho en la cumbia y yo lo tocaba de pequeño. Saqué mi viejo acordeón después de 30 años y vimos que las canciones cogían un aire superfresco que nos gustó mucho.
Va a ser complicadísimo llevar todo esto a los directos siendo tan solo dos personas.
-K.S.: Por el momento vamos a seguir con Niña Coyote eta Chico Tornado y Don Condor eta Ñora Alacrán se quedan en la recámara. Ya veremos si en un futuro salen.
-U.S.: No son dos proyectos que se puedan unir. No podemos tocar dos temas de uno y luego otros dos del otro. Son dos bandas totalmente separadas y, por eso, hemos sacado el disco con dos nombres diferentes. No podemos pasar de uno a otro.
Volviendo a esa cara B, uno de los temas, 'Dantzan', ha sido escrito por Maialen Lujanbio. ¿Cómo se gestó la colaboración?
-K.S.: Somos muy fan de ella y vimos que para esa melodía necesitábamos una letra que es como un zortzikotxikia, así que se lo propusimos.
-U.S.: No somos muy poetas y nos cuesta escribir, por lo que solemos pedir SOS. En este caso, como era un bertso se lo teníamos que pedir a un bertsolari y nuestra favorita era Maialen. Fue un regalazo.
El tema lo canta Ñora Alacrán.
-U.S.: Me obligaron (risas). Yo le tengo un poco de miedo a los micros pero al final es una banda para experimentar y para hacer lo que nos diera la gana.
¿Qué referentes han manejado?
-K.S.: Hemos escuchado bastante cumbia tradicional, pero también psicodélica y electrocumbia.
-U.S.: Hemos intentado absorber de muchos sitios y expulsar la mezcla. Creo que es la única manera de inventarse algo.
Bueno, un bertso en una cumbia suena a algo que estaba por inventarse.
-U.S.: Igual si te pones a buscar no. No están tan alejados. La cumbia es muy baserritarra, de ambiente campesino, y el bertso también. No veo tan lejos a esos campesinos colombianos cantando cumbia y los bertsolaris en la sagardotegi.
En esta cara también está 'Hiloba lantzen', que es una versión de Anestesia.
-U.S.: Son uno de nuestros referentes y siempre habíamos querido hacer una versión, pero desde Niña Coyote eta Chico Tornado nos parecía muy evidente. Siempre buscamos cosas más alejadas de nosotros. Pasar un tema de Anestesia a cumbia nos daba más rollo.
-K.S.: Hicimos la maqueta y pensamos: menudo temazo. Se la enseñamos a Mikel Kazalis (cantante del grupo ) sin avisarle de nada y le costó unos cuantos segundos pillarla porque es una versión muy diferente.
En lo que se refiere a temas de Niña Coyote eta Chico Tornado cuentan con letras escritas por Harkaitz Cano y Ioritz Apaolaza, recientemente fallecido.
-K.S.: Ambos nos ha hecho letras en todos nuestros discos. Hemos tenido la desgracia de que Ioritz nos dejara hace tan solo un par de semanas y ha sido un duro golpe perder a un amigo como él. Siempre decía que sus letras eran una mierda, pero a mí me encantaban. Y Harkaitz Cano es un máquina de la escritura.
¿Cada vez les cuesta más crear letras propias?
-U.S.: Siempre nos ha costado (risas).
-K.S.: A mí personalmente me cuesta llegar a algo que realmente me llene. Así como con la música tenemos más facilidad de crear, a otra gente como a Harkaitz Cano o a Maialen Lujanbio les pasa lo mismo con las palabras. Aún así, siempre nos quedamos contentos con lo que hacemos, aunque haya que apretarnos mucho.
Siguen siendo fieles al vinilo.
-U.S.: Siempre. El vinilo funciona muy bien y, de hecho, se agotan siempre. Ahora incluso hemos hechos más copias que de CD.
Van a presentar el disco, al menos las canciones de Niña Coyote eta Chico Tornado, en una gira que apunta a ser larga.
-U.S.: Sí, hoy estamos en Barcelona y mañana en Madrid. La semana que viene en Berriz y Logroño, luego Gasteiz, Benidorm... Vamos a seguir así varias semanas y luego la idea es salir fuera, pero el tema sigue raro con la pandemia. Hay que abrirse a la improvisación.
"Son dos bandas totalmente separadas y, por eso, hemos sacado el disco con nombres diferentes. No podemos pasar de uno a otro"