- El cuarteto donostiarra Madeleine, formado por Gartxot Unsain (guitarra y voz), Itzal Uranga (guitarra y voz), Jagoba Salvador (bajo) e Iñaki Benito (batería), se subirá hoy y mañana al escenario de la sala Dabadaba, en una doble cita con todas las entradas vendidas y en la que presentarán su cuarto álbum, Ezin dena.

Madeleine concluyó su última gira a principios de 2020 en China...

-Nos fuimos de gira a China junto con el grupo Shangai Qiutian. Fue una experiencia brutal. Casualmente, el concierto que ofrecimos el día de año nuevo de 2020 fue en Wuhan. Cuando llegamos nos comentaron que había un virus circulando y nos pidieron que tuviésemos cuidado y que no bebiésemos de las copas de otros, ya se comenzaba a hablar de mascarillas... En aquel momento, nosotros no nos lo tomamos muy en serio. Luego tuvimos la suerte de poder salir del país (ríe). El ciclo se cierra. Ahora aquí estamos mucho peor que en China en cuanto a la pandemia y nuestro primer concierto lo vamos a dar con una serie de canciones que estábamos componiendo cuando fuimos allí, antes del confinamiento.

No hay muchos grupos euskaldunes que hayan girado por China.

-No conozco la lista completa de los grupos que han girado por China. Que yo recuerde, nos comentaron que solo Berri Txarrak y nosotros lo habíamos hecho. Si ha habido otros, lo desconocemos.

¿Cómo es girar por China?

-Es original y curioso, porque es una cultura muy diferente. Nuestras circunstancias también fueron particulares, porque hicimos la gira en tren, algo que jamás habíamos hecho aquí; eso también le otorga otro punto diferenciador. Creo que para todos fue una experiencia única, inolvidable.

¿Cómo se consigue girar por China?

-En nuestro caso fue porque tenemos un buen amigo de aquí que vive en China y al que le encanta Madeleine, Eñaut Martí, oriundo de Orio. Nos lo propuso y al principio nos lo tomamos a broma. Al final, el tema fue adquiriendo seriedad. Además, nos concedieron una ayuda para poder hacer la gira y allí nos fuimos, casi sin pensar. De hecho, fue tan sin pensar que Gartxot no pudo venir a la gira y le sustituyó nuestro amigo y antiguo miembro del grupo Xabier Egibar; gracias a él pudimos completar el viaje. En nuestro caso fue así, habría que preguntar a Berri Txarrak cómo lo hicieron ellos (ríe).

Dice que alguno de los temas ya habían empezado a componerlos en aquel entonces, ¿el confinamiento posterior vino bien para rematarlos?

-Algunas pocas canciones de Ezin dena las empezamos a componer antes de ir a China y nuestra idea era grabar el disco después de la gira, antes del confinamiento. Obviamente, lo tuvimos que retrasar. El confinamiento nos vino bien para tomar algo de aire porque, es cierto, que los márgenes de tiempo que teníamos eran muy cortos. Nos vino bien para rematar mejor las canciones que ya teníamos listas, para terminar otras y también para hacer una buena selección de las canciones que queríamos introducir en el disco. Nos dimos cuenta de que algunas de nuestras ideas no cuajaban y, finalmente, quedaron los siete temas de Ezin dena; son los más redondos que teníamos.

¿Trabajar desde casa ha ayudado?

-Trabajar en casa a la hora de componer es interesante, en vez de ir al local de ensayo a lo loco y sin tener un plan. Sí que pudo llegar a venirnos bien.

'Su hura' surgió después de un largo periodo en el que Madeleine no estuvo en activo. 'Ezin dena' ha surgido mucho más rápido.

-Su hura fue una especie de reenganche a Madeleine después de mucho tiempo parados por cuestiones de carácter personal, pero fue tan satisfactorio que teníamos muchísimas ganas de seguir creando. Además, al grupo le dimos una especie de vuelco diferente, en cuanto a material e ideas. Queríamos seguir explorando por ese camino. Lo más importante son las ganas que le pones y nosotros tenemos muchas de hacer y presentar Ezin dena. Pero es cierto que la vida personal de cada uno y, por su puesto el covid-19, complica cada vez más la posibilidad de hacer conciertos, pero siempre que se pueda, los haremos.

¿'Ezin dena' comparte universo musical con 'Su hura'?

-Diría que algunas canciones sí. Me refiero a las más antiguas en el tiempo y, por lo tanto, las más cercanas a Su hura. Pero las últimas tienen un toque diferente. Por supuesto, si las ponemos en el contexto de toda nuestra discografía, las canciones de Ezin dena se parecen más a las de Su hura. Es normal, es parte de una evolución como personas, músicos y, en este caso, nos ha salido esto. El próximo quizá nos salga algo tecno... (ríe). Madeleine es un proyecto muy personal creado desde la amistad y hacemos lo que nos sale y nos da la gana.

Una pregunta típica que siempre se hace a los miembros de Madeleine tiene que ver con la etiqueta 'postrock'. En esta entrevista tampoco puede faltar porque, indudablemente, 'Ezin dena' no se adscribe a ese estilo.

-Lo del postrock nos hace hasta gracia. Nosotros no supimos qué era el postrock hasta después de ofrecer varios conciertos como grupo instrumental (ríe). Que fuésemos un grupo instrumental fue parte de un accidente. No era algo buscado. Empezamos sin cantar porque no nos apetecía y porque no encontrábamos una voz. Luego llegó toda esa etiqueta del postrock, que sigue haciéndonos gracia. De hecho, en Su hura hay una canción a la que llamamos Postrock por eso. El tema de las etiquetas está bien para hacerte una idea del tipo de música que puede ser pero, en nuestro caso, que hacemos un tipo de música que mezcla muchos estilos y que cambia mucho de una canción a otra, definir lo que hacemos con una sola marca es un poco banal. Que cada uno ponga las etiquetas que quiera.

Siendo eso así, ¿sobre qué estilos transita 'Ezin dena'?

-Es difícil de responder. Más que de estilos hablaría de sensaciones. La música es una forma de expresión y responde a una evolución a nivel personal, a la música que escuchamos... A la hora de hacer las letras se nota que tenemos treinta y pico, por ejemplo, y todas las dudas existenciales que podemos tener se ven plasmadas. ¿Qué estilos? Somos muy abiertos en la música y nos gusta desde el hardcore extremo o el heavy metal hasta el pop más mainstream. Diría que Ezin dena es el disco en el que más estilos hemos trabajado. Tenemos canciones que son bastante rápidas y que se asemejan a un hardcore alegre de los 90 o de los 2000, otras cosas mucho más oscuras o psicodélicas como es Nahieran o una canción a capela como es Bihar.

Madeleine presentará 'Ezin dena' hoy y mañana en la sala Dabadaba con las entradas agotadas.

-El aforo reducido ha contribuido a ello, pero reconozco que me he quedado asombrado de que las entradas para el concierto de hoy, siendo jueves, se agotasen en un día. Por ello organizamos una segunda fecha. ¿Tenemos un público fiel? Creo que sí, pero no solo por aficionados, también por amigos o familiares que les apetece vernos. Nuestro último concierto en Donostia fue hace casi dos años en Piratak. La pena es que se ha quedado mucha gente sin entrada.

"La música es una forma de expresión y responde a una evolución personal y a lo que escuchamos, entre otras cuestiones"

"Lo más importante son las ganas que le pones y nosotros tenemos muchas de hacer y presentar el nuevo disco"