- Lo primero que sintió la ilustradora sevillana María Hesse cuando se sumergió en la vida de Norma Jean Baker fue "cabreo" y por eso en su biografía ilustrada lo que ha hecho es abordar la "parte más humana" de Marilyn Monroe, "porque el mito ya lo conocemos".

Han sido muchos hombres, y pocas, muy pocas mujeres, las que se han lanzado a escribir la biografía de la rubia más famosa del cine y quizá por eso la mayoría solo tiene una visión de ella sesgada, es decir, que se han quedado con que era una actriz cómica con un físico exuberante.

"Había una visión muy machista, muy paternalista, eran todos camaradas y se iban contando lo que Marilyn era para ellos", comentó Hesse, quien denunció también que pocos se han parado a pensar en el "contexto" en que vivió la actriz.

Pero Marilyn era mucho Marilyn, y así lo demuestra la ilustradora en esta obra, Marilyn una biografía, publicada por Lumen, donde deja de fijarse en esa "debilidad o vulnerabilidad" para poner de manifiesto que fue una "luchadora" que "incluso en las épocas más maltratadas, cuando sufrió los abortos o los desprecios de su marido, ella remaba contra marea".

"A las mujeres nos meten en una cajita y parece que cuesta mucho trabajo salir y pegar el puñetazo en la mesa, y con Marilyn pasó, sobre todo por la época que le tocó vivir. Venía de una infancia complicada y eso la convirtió en vulnerable, pero tenía ese físico que la convirtió en un objeto. Pero ella estuvo toda su vida luchando por todo lo contrario, por ser sujeto de sí misma, de lo que quería ser, de los contratos que quería firmar", reivindicó la artista.

La artista respondió qué haría con Marilyn si aún viviera. Hesse confiesó que le parece "súper complicado" dar una respuesta, pero sí que reconoce que le diría alto y claro una cosa: "que mandara a tomar por saco a toda esa gente que estaba a su alrededor, porque me da mucha pena cómo todo el mundo que la rodeaba intentaba sacar tajada y lo hacía de una forma muy despreciable".