DONOSTIA - Siete mujeres se han hecho cargo de la nueva junta directiva de la Asociación de Músicos de Euskal Herria, Musikari, para trabajar por este sector "desprotegido" y sobre cuya situación consideran que existe "un gran desconocimiento" por parte de las instituciones.

Eneritz Dueso ha sustituido a Unai Moraza en la Presidencia de este órgano de dirección, que pretende funcionar de forma "horizontal" y del que también forman parte Idoia Hernández, Olatz Salvador, Miren Narbaiza, Lide Hernando, Garazi Esnaola e Izaro Andrés.

Las siete acceden a los nuevos puestos en un año en el que "la música, y la cultura en general, han sido duramente golpeados", según han destacado en una rueda, en la que han anunciado que en los próximos días se presentará un "plan de reconstrucción del sector musical" elaborado por la Unión de Músicos Profesionales (UMP), federación creada el pasado mes de mayo y de la que Musikari forma parte junto a otras asociaciones españolas.

En este comparecencia, que ha tenido lugar en Donostia, han señalado que ese plan tiene "tres vertientes principales": "preservar, fomentar y favorecer el trabajo y la actividad económica en el sector", "ofrecer la debida protección social y mejorar la situación económica de los músicos" y "reconocer el valor esencial y fundamental de la cultura, y de la música en particular".

"Queremos reivindicar el valor que tiene la cultura per se, que sea considerada como un bien de primera necesidad. Queremos blindar, proteger la cultura", ha recalcado Olatz Salvador, antes tesorera y ahora vocal de Musikari.

Idoia Hernández ha asegurado que tenían "razones de sobra para ponerse en movimiento" antes de la pandemia y ahora con mayor motivo, ya que la gran mayoría de los músicos vascos se han quedado sin ayudas.

"La covid-19 ha dejado más en evidencia, si cabe, la precaria situación que viven los músicos desde hace mucho tiempo. La labor de interlocución y reivindicaciones en pro de la dignidad de los músicos que se hacen desde la asociación son imprescindibles en estos momentos", ha afirmado.

Narbaiza ha asegurado que ha dicho que es "más importante que nunca" poner en marcha el Estatuto del Artista, aprobado en 2018.

La ausencia de tres de las integrantes de la junta directiva a la rueda de prensa por estar en sus "otros trabajos" es "uno de los principales motivos" que, según las representantes de esta asociación, explica por qué el sector no está "activo" y su candidatura ha sido la única en postularse para la renovación de cargos en la asociación.

Los músicos se ven abocados, han precisado, a buscar otra profesión por la "falta de protección" que existe en el sector, que también se enfrenta a problemas a la hora de solicitar ayudas. Como ejemplo, han citado la última convocatoria de ayudas del Gobierno Vasco, en la que se les exigía haber tenido un contrato de trabajo por cuenta ajena durante al menos 90 días.

"¿Qué músico lo tiene? Los de la Orquesta de Euskadi, sí. Hay un gran desconocimiento de cómo está el sector", ha denunciado Eneritz Dueso, quien ha señalado que los músicos forman parte de "un colectivo heterogéneo condenado a trabajar en la alegalidad" porque "el valor de la cultura no se puede medir en términos económicos".

Musikari cuenta con 310 socios. Sus nuevas responsables han dicho que todos tendrán voz en la asociación, también los que no pertenecen a ella, pues entienden que es necesario unirse, tejer "una gran red", por lo que han hecho un llamamiento "a todos los agentes culturales, sin excepción" para ponerse a ello.