donostia - Juliette chica valiente es la obra autoeditada de Nerea Kortabitarte y el ilustrador Rubén B. Caballero, que recurre a la visión del mundo de una niña de siete años para animar a los más pequeños a ser lo que deseen. Gracias a la financiación de Olatuak, los autores han conseguido publicar "el cuento de sus sueños", con tapa dura y papel ecológico. Además, por cada uno de los 500 ejemplares vendidos, se destinará un euro a la Asociación Súper H de niñas y niños con enfermedades oncológicas.

¿Qué le motivó a escribir una historia de lucha contra los estereotipos de género?

-El origen de Juliette se remonta a un momento con mi hija mayor, que me quedó grabado. Al regresar de la escuela me contó que otro niño de clase le había dicho que no parece una niña porque contesta. El hecho de que con edades entre siete y ocho años ya tengan tan interiorizado que las chicas no pueden contestar y tienen que callarse, me dejó un poco alucinada. Es cuando surge un debate en casa al respecto, porque tenemos una sensibilidad especial a los temas de igualdad, aunque como cualquier familia en la actualidad. Después, poco a poco aparece el texto en el que recurro a situaciones cotidianas que se pueden presentar a cualquier niña o niño hoy en día.

¿Por qué un cuento infantil?

-En casa siempre he utilizado cuentos infantiles para tratar diferentes temas con mis hijas, pero no encontraba nada en materia de igualdad y estereotipos que estuviera dirigido a edades tempranas, como sí existen otras ediciones muy chulas de niñas rebeldes para más mayores. Me pareció una buena idea crear un cuento infantil con esos valores, que permita trabajar con niñas y niños estos temas en casa, pero también en los colegios, y sobre todo que les permita reflexionar sobre la idea de que son libres y pueden decidir.

¿Está dirigida a niñas y niños de hasta siete años por algo en particular?

-Pensamos en un público de estas edades, en primer lugar porque propusimos que el cuento incluyera un amplio contenido de ilustraciones. Empezamos con este proyecto hace un año y el resultado ha salido como lo queríamos desde un principio.

¿Cómo puede influir la literatura en estas edades, cuando ya se ve que empiezan a tomar decisiones?

-Choca un poco ver a niñas y niños tan pequeños, que se encuentran en fase de desarrollo y aprendizaje, reproducir ciertos estereotipos y cómo los roles marcados calan tanto en ellos. De ahí la importancia de materiales como la literatura porque son herramientas útiles que permiten trabajar estos temas de tanta relevancia, como es la igualdad.

¿En quién está inspirada 'Juliette'? ¿Alguna niña en particular?

-En Juliette hay alusiones personales a muchas mujeres de mi vida y mis referencias han sido también grandes mujeres de la cultura. Como seguidora de Juego de Tronos, siempre me gustó el personaje de Aria Stark y desde el principio de la serie la llamé "mi chica valiente". En ella vi cualidades realmente maravillosas: valiente, poderosa, etc., y fue algo natural pensar en ello al crear a Juliette.

¿Y el nombre recuerda a alguien?

-Surgió de manera espontánea, buscando un nombre francés en vista de que la historia se desarrolla en París. Además, siempre he admirado a la actriz Juliette Binoche, que precisamente es francesa.

La historia se ha construido sobre la línea del lenguaje no sexista e inclusivo.

-Esa era la idea desde el principio, escribir una historia en la que la protagonista es una niña con unas cualidades muy fuertes, que normalmente se atribuyen más a los niños. Por eso, la redacción del cuento ha pasado por el control de una especialista en lenguaje de igualdad, que lo ha evaluado con la finalidad de ofrecer una lectura con perspectiva de género.

Los mensajes de igualdad y respeto a la identidad, ¿cómo se reflejan en el cuento?

-Principalmente a través de preguntas y respuestas. Juliette plantea muchas interrogantes y en las contestaciones que recibe por parte de las personas adultas, se exponen diferentes ideas para ayudar a reflexionar a las niñas y los niños sobre la igualdad y el respeto a los demás.

Además de valiente, ¿qué otros valores transmite el personaje a las niñas y niños que lean su historia?

-En Juliette encontrarán a una niña muy fuerte, un personaje que empodera y con el que las niñas, así como los niños, se sentirán identificados porque, además, tiene una personalidad que cautiva. Juliette se siente muy poderosa y con siete años es capaz de transmitir muchos valores, como la libertad para decidir lo que quiera ser, poder jugar a los piratas si le apetece y vestir como a ella más le guste. Bruno, otro personaje secundario muy querido, es más tranquilo y contrasta completamente con Juliette, pero también con muy buenas aptitudes y ayuda a difundir el mensaje de que cada persona es única al ser quien es.

¿Son ahora más necesarias estas referencias en la literatura, femeninas y valientes? ¿Se demanda este tipo de literatura?

-Cada vez más son necesarias y se demandan, porque en las familias entienden que por medio de la literatura y de cuentos como el de Juliette, se pueden explicar distintos temas como igualdad y estereotipos a los más pequeños. También faltarían más personajes femeninos valientes que enseñen a niñas y a niños a luchar contra los roles y estereotipos marcados por la sociedad.