NOTICIAS DE GIPUZKOA ha pedido a cuatro expertos que han seguido muy de cerca las distintas programaciones que ha acogido este espacio desde su inauguración el 23 de agosto de 1999 que seleccionen los 20 conciertos de distintos estilos que, a su juicio, esbozan una muestra de lo más representativo que se ha subido a las tablas de este escenario.

El que fuera director de la Quincena Musical entre 1979 y 2009 y responsable de la programación de música clásica de Fundación Kursaal/Kursaal Eszena desde el año 2001 hasta el año 2017, José Antonio Echenique; el promotor musical Sergio Cruzado; el periodista radiofónico de Onda Vasca José Joaquín Forcada, Forki, y la crítico especializada en clásico de la revista Argia, Montserrat Auzmendi del Solar, no lo han tenido fácil.

No en vano, en este tiempo el Kursaal ha acogido un total de 2.345 eventos culturales, conciertos, representaciones y espectáculos variados, a los que han asistido casi siete millones de espectadores -el número de eventos culturales ha ido creciendo a lo largo de los años, siendo 2018 el año en el que mayor número se ha programado: 152-.

La presencia de programación clásica es una de las señas de identidad del Kursaal, dado que es la sede principal del festival de música clásica más antiguo del Estado, la Quincena Musical, y es también parada habitual de la Orquesta Sinfónica de Euskadi (OSE), puesto que es una de sus sedes durante la temporada de abono.

En cuanto al festival ahora dirigido por Patrick Alfaya, ha celebrado más de medio millar de conciertos en este tiempo, mientras que la OSE ofrece cada año 22 conciertos -dos por cada programa-. Además de conjuntos locales como el Orfeón Donostiarra o corales como Easo o la Andra Mari, al escenario del auditorio se han subido conjuntos como la Orquesta de la BBC, la Filarmónica Checa, la de Copenhague y la de Helsinki, entre otros, con directores de la talla de Gustavo Dudamell o Jesús López Cobos.

También han desfilado otras figuras como B.B. King, Diana Krall, Bobby McFerrin o Woody Allen. Estos lo han hecho en otro de los pilares de los cubos diseñados por Rafael Moneo: el Jazzaldia.

Obviamente, no puede dejarse a un lado la programación propia del palacio de congresos, agrupada bajo el nombre de Kursaal Eszena -hasta el 1 de enero de 2014 la actividad cultural se englobaba dentro de la Fundación-, que desde su surgimiento ha ofrecido 628 conciertos y espectáculos, con una oferta muy variada que también se adentraba en otros géneros como el pop, el folk y el rock, y que ha permitido exhibiciones tanto de artistas vascos como de foráneos.

20 aniversario Con motivo de las dos décadas del complejo, se ha preparado una gala que tendrá lugar este jueves, un espectáculo para el que aún quedan entradas a un precio de 40 y 50 euros. Siendo fiel a las distintas almas que ha albergado durante estos años, los programadores han preparado una gala que unirá pop rock actual con música y danza clásica.

Así, el programa, con destacado marchamo local, aunará a la OSE y el Orfeoi Gaztea, bajo la batuta de Juan José Ocón, con la actuación de la soprano Elena Sancho Pereg, la interpretación de cantantes como Izaro, Mikel Erentxun y Eñaut Elorrieta, y la danza de Lucía Lacarra. Un concierto que seguro que será recordado cuando el Kursaal llegue a los 40.

La selección de José Antonio Echenique

El que fuera director de la Quincena Musical (1979-2009) y responsable de la programación de música clásica de Fundación Kursaal/Kursaal Eszena (2001-2017), José Antonio Echenique ofrece una mirada retrospectiva de alguien que conoce cómo ha sido trabajar desde dentro, memoria viva del lugar.

19 de agosto de 1999 Primer concierto en el Kursaal. "En el primer concierto que se celebró en el Auditorio del Kursaal, los protagonistas fueron los niños, por ser el público del futuro del nuevo edificio que iniciaba su andadura. El concierto se celebró bajo el epígrafe de Haurrentzako kontzertua (Concierto infantil) y fue una coproducción de la Quincena Musical de San Sebastián y el Kursaal. Para dar forma a aquel concierto especial se contó con la participación de la Orquesta Sinfónica de Euskadi, dirigida por Mario Venzago; los payasos Txirri, Mirri eta Txiribiton; la Tamborrada del colegio San Ignacio de Gros; y los bertsolaris Beñat Garate e Imanol Murua. Los presentadores fueron Fernando Argenta y Araceli González Campa (del programa Clásicos Populares de RNE) y Jose Inazio Ansorena".

16 de agosto de 2001 Rigoletto de Verdi , la primera ópera que se representó "En 2001 se celebró el Año Verdi y, coincidiendo con esta efeméride, en el auditorio del Kursaal se representó la ópera Rigoletto del compositor italiano. Fue la primera ópera que se llevó a escena en el Kursaal (ópera escenificada). La programó la Quincena Musical de San Sebastián. Bajo la dirección de Jesús López Cobos, que fue el director musical, y con Jonathan Miller de director de escena, participaron solistas de la talla del tenor Aquiles Machado (en el rol del Duque), el barítono Alexandru Agache (Rigoletto) y la soprano María José Moreno (Gilda). La producción del English National Opera destacó y sorprendió por su originalidad ya que estaba ambientada en el Chicago de los 20".

26 de agosto de 2005 Sinfonía número 8 , de Gustav Mahler. "La Sinfonía Nº8 de Gustav Mahler es una de las obras corales de mayor escala del repertorio orquestal clásico. Debido a que requiere una enorme cantidad de instrumentistas y coristas, no es una obra que se programe con asiduidad. La Quincena Musical la programó en 2005, si bien para su interpretación se tuvo que hacer una auténtica obra de ingeniería en el Kursaal: se tuvieron que retirar cuatro filas de butacas y ampliar el escenario para poder dar cabida a los más de 400 intérpretes. Era la primera vez que intervenía tanta gente sobre el escenario. La Quincena Musical daba fin, con esta Octava, a la integral de las sinfonías de Gustav Mahler que había comenzado a programar e interpretar en el año 1996. Hasta aquel 26 de agosto de 2005, nunca se pudo interpretar esta obra en el Kursaal. Participaron, bajo la batuta del director Víctor Pablo Pérez: la Orquesta Sinfónica de Galicia, el Orfeón Donostiarra, la coral Andra Mari, la Escolania del Coro Easo y un total de ocho solistas.

23, 24 y 25 de agosto de 2008 El triple éxito de Sara Baras con Carmen. "Sara Baras es de las pocas artistas que, en estos 20 años de andadura del Kursaal, ha colgado el cartel de No hay entradas durante tres días consecutivos. La bailaora gaditana interpretó, dentro de la Quincena Musical de 2008, el mito de Carmen, con un lenguaje nuevo y rotundo, en un espectáculo dirigido, coreografiado y protagonizado por ella misma. Fue un éxito rotundo de público que llenó durante tres días consecutivos el auditorio: más de 5.000 personas vieron el espectáculo".

21 de febrero de 2009 Juan José , estreno póstumo de Pablo Sorozabal. "El compositor donostiarra Pablo Sorozabal no pudo estrenar su ópera Juan José en vida. Una serie de desavenencias con Jesús Aguirre (que por aquel entonces ostentaba el título de Duque de Alba), hicieron que la obra se retirara. El estreno tuvo lugar a los 40 años de su creación; el 21 de febrero de 2009, dentro de la programación de Fundación Kursaal. Intervinieron la Orquesta Sinfónica de Musikene bajo la dirección de José Luis Estellés, y solistas como Ana Mª Sánchez, Maite Arruabarrena, Manuel Lanza, Simón Orfila . El estreno de la obra se llevó a cabo en versión concierto (no escenificada). A los dos días se representó en el Auditorio Nacional de Madrid".

La selección de Sergio Cruzado

Como promotor y responsable de Ginmusica, Sergio Cruzado es uno de los veteranos de la escena donostiarra y también ha programado en el Kursaal.

18 DE ABRIL DE 2000 Lou Reed y Enrique Morente, recordar a los que no están. "Lou Reed y Enrique Morente son dos artistas increíbles, genios. En el Kursaal hemos podido ver a parte de la Historia de la música como es Lou Reed. Con Morente quedé en shock: programamos su concierto el 12 de diciembre de 2010, pero lo suspendió unos días antes por unas complicaciones en el hospital. Murió al día siguiente del concierto programado. Me quedo con su recuerdo en el Velódromo con el disco Omega".

21 de diciembre de 2002 Fiesta con Bunbury. "Era un día de Santo Tomás. Al principio el Kursaal parecía un recinto muy serio, pensado para conciertos sentados, tranquilos y con gente mayor. De repente, se mezclaron varios factores: la gente llegaba con unos ciclones importantes de la Parte Vieja, había una telonera y una barra abierta, y que los fans de Héroes del Silencio son muy fans, y que Bunbury es tan teatral que saca el lado más intenso de todo el mundo Se montó tal fiesta que los de seguridad estaban un poco desesperados. El público: incontrolable, divirtiéndose. Y me dije, pues también sirve para hacer conciertos con la gente bailando y de pie".

5 de mayo de 2009 Cuando Anthony and the Johnsons le "helaron la sangre". "Anthony and the Johnsons es una de mis debilidades. Este hombre es pura emoción. Cerrabas los ojos y tenías la sensación de que sus melodías te paraban la circulación, te helaban la sangre. Cuando alguien tiene esa voz y ocupa el espacio de semejante forma, yo creo que escuchas hasta el edificio. Hope There s Someone la iría a escuchar 100 veces al Kursaal.

3 de noviembre de 2011 Wilco, "los mejores". "Les he visto las dos veces. La primera, como espectador, disfruté como un enano. La segunda, cuando organicé el concierto, reconozco que me volvieron un poco loco. Aun así, creo que en pocos conciertos me han impresionado y apabullado de semejante forma musicalmente. Me parece un grupo grandísimo: de los mejores de la historia. Cuando llegaron con un tráiler dije: ¡Pero si ponemos el sonido y las luces! ¿Me habré equivocado? Solo estaba lleno de instrumentos ¡Qué barbaridad! ¡Cómo llenaron el escenario!. Me parece una de las mejores bandas en directo que he visto en mi vida. Además, ese concierto abrió la primera edición de Donostia Festibala (junto a Primal Scream en el velódromo), que luego pasó a Igeldo y ahora se celebra en el hipódromo".

5 de enero de 2019 Izaro, la joven promesa vasca. "El concierto de Izaro lo viví desde dentro. Todo el proceso, desde que planteamos un espectáculo que a muchos les parecía sobredimensionado, hasta que se llegaron a agotar las entradas una semana antes de la cita. Que alguien de aquí, de 25 años, autogestionando su carrera, consiga llenar el Kursaal y haga llorar al público de tres generaciones diferentes me parece que es algo muy grande. Recuerdo que pensé que si no existiera el Kursaal, no podríamos haber dado este golpe en la mesa. En estos 20 años se ha convertido en el recinto de la ciudad que te consagra. Evidentemente, para mí ha sido uno de los conciertos más bonitos que he vivido en este espacio. Ver a Izaro subir en el ascensor en el bis para bajar después todas las escaleras del patio de butacas cantando, mientras la gente aplaudía y cantaba con ella, y todo lo que vivimos allí, fue muy bonito".

La selección de J.J. Forcada

Uno de los referentes del periodismo musical en las ondas de Gipuzkoa, J.J. Forcada, Forki, ofrece unas pinceladas sobre la programación del Jazzaldia en el Kursaal, trae a la memoria el Plaza Festival (1999-2003) y coincide con Cruzado en señalar el concierto de Wilco de 2001.

1999-2003 Plaza Festival, encuentro multidisciplinar. "Nos referimos a un festival multidisciplinar en cuanto a creaciones artísticas. Se desarrolló en las salas polivalentes del Kursaal y muchos de los espectáculos que disfrutamos se habían encargado expresamente y únicamente para estas citas. Siempre con un carácter atrevido y lejos de las corrientes imperantes, nos deleitó con las propuestas de Beñat Achiary , Linda Sharrock, Iva Bittova, Lisabö, Mark Feldman, Martin Carthy, Ruper Ordorika, Juan Gorriti, Alvaro Machinbarrena, Joxan Artze, Antonio Escohotado y un larguísimo etcétera".

24 de julio de 2005 Jarrett, fundido con el piano. "Ya había pasado en varias ocasiones por Donostia, siempre con resultados muy satisfactorios. En la 40 edición del Jazzaldia la organización decidió dar a Keith Jarrett el premio Donostiako Jazzaldia. Apenas dijo un gracias inaudible cuando le entregaron el premio. Su forma de agradecerlo fue con un concierto tremendo. Acompañado por Gary Peacock y Jack Dejonette, dejó constancia de por qué en ese momento era el pianista de jazz más emocionante que existía. Totalmente fundido con el piano y con sus habituales gritos mientras interpretaba, trasmitió sensaciones difíciles de plasmar en unas pocas palabras pero que desde luego asombró y satisfizo plenamente a los allí presentes".

12 de Julio de 2008 Tom Waits, el mito. "Una ocasión única, nunca había estado por aquí. Tom Waits, un mito, un artista venerado por los sectores mas modernos y que apenas se deja ver en directo. El carácter de concierto extraordinario con sus especiales pormenores de venta de entradas, precios de las mismas, etc. Se confirmó y engrandeció con un show a la altura del mito. Fueron 24 canciones a cada cual mas satisfactoria. Su voz, única, se amoldo a la perfección a la galería de estilos que fue proponiendo durante un show memorable e inolvidable".

3 de noviembre de 2011 Wilco, "disfrute absoluto". "Fue una de esas pocas ocasiones en las que agradeces ver un concierto de rock en un auditorio, sentado, con todo lo que ello supone. Wilco, el grupo de Jeff Tweddy, demostró por qué era considerado en ese momento uno de los grandes grupos de rock. Alternó momentos de una especial sensibilidad con trallazos eléctricos protagonizados por el guitarrista Nels Cline. Con una división de la banda en dos grupos, cada uno moviéndose independientemente pero llegando al destino establecido, consiguió un equilibrio estilístico con canciones casi perfectas en maravillas como Impossible Germany. Dos horas de disfrute absoluto".

27 de Julio 2013 El tsunami llamado John Zorn. "Por fin el Jazzaldia trajo a uno de los grandes iconos de la música más radical de los últimos 30 años, John Zorn, y lo hizo con una maratón en la que se aunaban distintas propuestas. Fue un concierto único en Europa, en el que un tsunami sonoro arrasó con todo lo preestablecido, consiguiendo en casi cinco horas que las doce formaciones que desfilaron por el Kursaal bajo el influjo de Zorn nos hicieran replantearnos algunos de los códigos que utilizamos a la hora de disfrutar con la música, sea cual sea. Arrebatador".

27 de Julio de 2018 Brad Meldhau, cada vez mejor. "También nos ha visitado en varias ocasiones y en distintos formatos. Cada vez que viene supera las expectativas creadas. Su concierto del año pasado fue un compendio de lirismo, de sensibilidad y de técnica desbordante. Nada previsible, sorprendió en cada una de sus interpretaciones. Sin apenas mirar al teclado consiguió con la ayuda de Larry Grenadier y Jeff Ballard transportar al espectador a cotas de placer inesperadas. Lo hizo moviéndose entre el pop y la música contemporánea con la mayor naturalidad posible".

La selección de Montserrat Auzmendi Solar

Texto: La crítica de Argia, Montserrat Auzmendi del Solar, selecciona cinco conciertos "bastante alejados en el tiempo, por el hecho de que realmente solo pasado el tiempo uno puede darse cuenta de que aquello supuso un antes y un después", aunque también es consciente de que "el tiempo maquilla los recuerdos".

30 de agosto de 1999 La Orquesta del Siglo XVIII y las sinfonías de Beethoven. "Con la interpretación de la Sinfonía nº 9, la Orquesta del Siglo XVIII y la Coral Andra Mari, dirigidos por Frans Brüggen, culminó la integral de sinfonías de Beethoven que esta orquesta historicista ofreció en la Quincena Musical en 1999. Las ocho anteriores fueron interpretadas en el Teatro Victoria Eugenia, y esta novena supuso el arranque del auditorio Kursaal. La peculiaridad del sonido de esta orquesta, en la que los instrumentos son originales, la dirección impecable de Brüggen, y la para mí entonces especial acústica del nuevo auditorio no me gustó demasiado en un principio, pero me enamoré de ella después hicieron que este concierto quedara grabado en mi memoria".

2000-2002 Zacharías y los integrales para piano y orquesta de Mozart. "En este caso no se trata de un único concierto, sino de toda una serie que comenzó en Quincena Musical en el 2000 y culminó en 2002. A lo largo de estas tres ediciones del festival, Christian Zacharias interpretó, como solista y director, los conciertos para piano y orquesta de Mozart. El primer año lo hizo junto a la Scottish Chamber Orchestra, mientras que los dos años siguientes fue la Orchestre de Chambre de Lausanne la agrupación que acompañó al maestro Zacharias. Se trata de un intérprete absolutamente carismático, a la par que natural. Su Mozart es elevado, pero nada amanerado, y la cercanía con la que abordó este exigentísimo reto, junto con el feeling entre orquesta y director que proyectaban, hicieron de cada uno de los conciertos auténticas joyas para el recuerdo, sin ninguna duda".

5 de mayo de 2001 Zimerman contra todas las adversidades. "Este recital hubiera podido ser considerado como maldito, si no hubiera sido porque el resultado final fue realmente sublime. Maldito porque fue pospuesto dos veces, por motivos bastante extravagantes: al parecer, algún compuesto químico presente en el piano con el que siempre viajaba fue confundido en el aeropuerto con una sustancia explosiva, lo que impidió que pudiera traer su instrumento. De esta manera, el solista invirtió un largo tiempo en conseguir otro piano de su gusto, y de ahí las sucesivas cancelaciones del recital. Por otra parte, llegado el día del concierto, tras el descanso, una cuerda del piano se rompió, lo que provocó otra ración de desasosiego. Eso sí, una vez resueltas todas las dificultades, Zimerman encandiló al auditorio con su fantasía al piano (el programa estaba compuesto por la Sonata nº 31 de Beethoven, y Klavierstücke op. 118 y Sonata nº 3 en fa menor, ambas de Brahms). Perfección técnica unida a una poesía especial que hace que obras que hemos escuchado mil veces suenen siempre como una aventura".

27 de agosto de 2003 El binomio, Filarmónica de Israel-Zubin Mehta. "El binomio fantástico que constituyen la Filarmónica de Israel y su director musical vitalicio, Zubin Mehta, es una auténtica bomba para los melómanos. En aquella ocasión, hace ya más de dieciséis años, el poder vivir en directo la calidad de este músico franco y sincero en su visión de la música, disfrutón encima de un escenario, junto a su orquesta, de una tremenda potencia de colores, dejó profunda huella en mi fonoteca particular. Que Gustav Mahler es uno de los compositores que Mehta borda es de todos sabido, y en este concierto, la obra Das Lied von der Erde (La canción de la Tierra) nos llegó con toda su carga poética. Fue un concierto para el recuerdo (el programa se completó la Sinfonía nº 6 en do mayor, de Schubert)".

20 de agosto de 2011 Electrizantes Romeo y Julieta. "Termino la selección con un ballet que fue una bocanada de energía y perfección: Romeo y Julieta. Las actuaciones del Ballet del Gran Teatro de Ginebra son siempre impactantes. Hace tres años, en 2016, hicieron un Tristán e Isolda simplemente maravilloso. Pero la producción de 2011, con la soberbia música de Prokofiev y la expresiva coreografía de la suiza Joëlle Bouvier, fue absolutamente electrizante. Tuvo un acercamiento totalmente carnal y contemporáneo a la historia de los amantes de Verona. Todavía rondan por mi memoria las escenas de peleas entre las familias Capuleto y Montesco, en las que, tal como ella relató, tuvo como referencia las luchas callejeras de los filmes de Pasolini; o la tremenda sensualidad y poesía que desprendía la escena del dúo de amor. Una auténtica delicia".