“Para finales de año, el casco de la embarcación tendrá su altura final”

donostia - La factoría Albaola avanza en la construcción de la réplica de la nao San Juan, que para finales de año contará con una estructura que tendrá ya la altura final de la embarcación del siglo XVI. “Casi hemos terminado la estructura de dos de las cubiertas del ballenero”, señala Markos Sistiaga, responsable del taller de Albaola, quien apunta que la nave tendrá un total de tres alturas. “Ahora hemos llegado al primer piso y hemos colocado los ligazones que van del primero al segundo; son 49 piezas en cada lado, una especie de costillas que le dan altura a la embarcación”, explica Sistiaga.

La base de la nao San Juan ya está construida, ya que la parte inferior del esqueleto del barco está montada, y casi han terminado con el segundo tramo. Aun así, algunos de los ligazones de esta parte se quedarán sin poner. Serán los que están más cerca de la proa, ya que las próximas piezas grandes se introducirán por ahí: los durmientes y baos son las piezas con las que trabajarán ante el público los carpinteros de Albaola. “El próximo paso será comenzar a poner el suelo de la primera cubierta”, anuncia el responsable del taller, que calcula que comenzarán con esa labor la próxima semana o dentro de dos semanas, como mucho. “En un mes lo habremos finalizado”, avanza.

Siguientes pasos Los últimos meses de este año, la nao dará otros pasos importantes en su construcción, ya que los trabajadores de la factoría levantarán el último tramo de la embarcación con los ligazones, y llegarán a la tercera y última cubierta. “Antes de fin de año, el casco de la embarcación tendrá la altura final”, asegura Sistiaga. Aparte de esto, también van a poner las tablas que van a cubrir el casco, por lo que la apariencia del barco cambiará considerablemente en unos pocos meses.

En un principio, el proyecto de la nao San Juan contemplaba que en 2016 se convirtiera en la embajada móvil que patrocinaría la Capitalidad, pero después de retrasarse su culminación hasta 2019, más o menos, el proyecto fue reconvertido. En el libro que presenta algunas de las propuestas de Donostia 2016, la nao figura como una iniciativa más dentro del Faro de la Vida, en el que se dice que esta embarcación es “un símbolo del patrimonio subacuático de la Unesco”, cuyo “proceso de construcción se presenta como una forma atractiva para recuperar labores artesanas y tradiciones fuertemente arraigadas a la cultura marítima”.

Por ahora, no saben cómo recibirán el año de la capitalidad en Albaola, pero Sistiaga cree que todos aquellos que acudan a visitar la factoría a principios de 2016 podrán ver la embarcación bastante avanzada, pues calcula que ya estarán colocando el suelo de la segunda cubierta.