Donostia. Los músicos de la Orquesta Sinfónica de Euskadi tocaron ayer en la plaza Zuloaga de Donostia mientras en el atrio de la Alhóndiga de la capital vizcaina lo hacían los de la Sinfónica de Bilbao. Más de 1.000 músicos de las 26 orquestas que existen en el Estado ofrecieron a la misma hora, a las 19.00 horas, conciertos gratuitos en diferentes ciudades para mostrar su rechazo a los "recortes" en sus agrupaciones musicales y a la subida del IVA cultural.
La convocatoria, impulsada por la Asociación de Músicos Profesionales de Orquestas Sinfónicas (Ampos), buscaba "dar una respuesta colectiva y llamar la atención sobre la situación crítica en la que se encuentran las orquestas sinfónicas y defender la continuidad de su actividad". Según los promotores de la iniciativa, el mensaje a administradores y representantes elegidos por la ciudadanía es que contraigan el "compromiso de respetar, proteger y desarrollar las orquestas sinfónicas profesionales como garantes de la excelencia musical", ya que destruir una orquesta es como cerrar una biblioteca o un museo.
situación crítica "La situación es crítica en algunas orquestas españolas que están incluso en riesgo de desaparecer", certifican desde la asociación. Pero si a las formaciones musicales les ha afectado los recortes por la crisis económica, la puntilla parece haber sido la brutal subida del IVA cultural, que saltó en 2012 del 8% al 21%, tanto en las entradas de cine, teatro y toros, como en conciertos y festivales musicales. "Esto es la guerra total", dijeron los productores. El libro fue el único sector privilegiado, ya que su IVA se mantiene al 4%. Una subida impuesta por el Gobierno de Rajoy que ha recibido numerosas quejas desde todos los sectores culturales y que todo parece indicar que podría ser revisada ya que, lejos de conseguir una mayor recaudación, está acabando con el consumo cultural.