Joserra Senperena sitúa su nuevo disco "entre la melodía y la abstracción"

DONOSTIA. Joserra Senperena (Donostia, 1965), uno de los músicos más solicitados de la escena vasca, dedica estos días a girar con Fito & Fitipaldis. En otras ocasiones lo ha hecho junto a sus compañeros de Bide Ertzean o ha realizado los arreglos para artistas como Rafael Berrio, Mikel Erentxun o Alondra Bentley. Solo cuando consigue desconectar "durante una temporada larga", encuentra el sosiego necesario para componer sus propias obras. En los últimos años ha publicado trabajos de piano solo en proyectos que le han unido a escritores como Harkaitz Cano o Patxi Zubizarreta, y ahora, en su disco 10 trio piano, biolin eta akordeoirako (Hotsak), ha optado por una fórmula que calificó de "trío atípico".

Tras el breve pero hermoso concierto que ayer acogió el Club del Victoria Eugenia para presentar el álbum, Senperena recordó que el trío clásico suele ser de piano, violín y cello, instrumento este último que él ha sustituido por el acordeón para que las composiciones adquieran un tono "más popular" y "menos serio". De hecho, apuntó, las piezas poseen una "estructura pop" en la medida en que "tienen introducción, estrofa y estribillo". "Ese es el andamiaje", incidió.

"El disco se mueve entre la melodía y la abstracción", declaró el músico donostiarra, que ha puesto especial empeño en que la música "guarde un cierto aire cantábile" sin perderse en "disquisiciones intelectuales", que fueron las que hicieron que el público se alejara de la música clásica. "Me parecía importante que en los momentos más ásperos de esta obra haya un aire cantábile y que la gente no pierda ese lazo con la emoción", insistió.

Para esta nueva aventura que presentarán en directo el 1 de febrero en Donostia ha contado con dos integrantes de la orquesta de música contemporánea Krater Ensemble: Xabier Gil, solista de la Orquesta Sinfónica de Euskadi, y Naiara de la Puente, acordeonista ganadora de varios premios internacionales. Ambos agradecieron la oportunidad de colaborar en un proyecto alejado de sus ocupaciones habituales. "Es un trabajo distinto, con otro tipo de sonoridades", dijo De la Puente, a lo que Gil añadió: "Yo vengo el mundo clásico casi exclusivamente y me gusta abrirme a otros géneros, así que estoy encantado de participar".

Preguntado por cómo influyen en su propia música las colaboraciones con grupos de pop y rock, Senperena contestó que "todo es uno" y que su último disco no sonaría igual si solo se dedicara a tocar música clásica. En cualquier caso, rechazó los "compartimentos estancos" que muchas veces originan barreras entre unas músicas y otras, al tiempo que opinó que la música, la literatura y el arte "deben ser libres, sin diferencias entre géneros".