Madrid. Ángel Cristo, domador y empresario de circo, falleció la madrugada de ayer de un paro cardiaco en el Hospital Universitario de Alcorcón a los 66 años, según informó la familia.

Hijo de Margarita Dordid, contorsionista cuyo nombre artístico era la pequeña Carolina, y del trapecista griego Christophol Papadópulos, vivió desde que nació (Huelva, 1944) bajo la carpa del pequeño circo propiedad de su familia, en cuyos espectáculos participó en todo tipo de variedades, aunque siempre sintió predilección por las fieras.

Debutó como domador en 1966, el día de su cumpleaños. Cuatro años después se convirtió en empresario al adquirir un pequeño circo que con el tiempo se transformó en el Circo Ruso, con más de 300 personas trabajando bajo su dirección.

Cristo tuvo numerosos accidentes de trabajo a lo largo de su carrera, algunos de ellos de gravedad, pero siempre salió adelante pese a las secuelas que le dejaron. En noviembre de 1980 fue atacado por uno de sus leones, de nombre Tarzán, que le produjo heridas en los hombros y en la axila derecha. En 1982 fue atacado en varias ocasiones.

En 1984, mientras actuaba en Valencia, resultó herido en la espalda y en diciembre de 1988, esta vez en Barcelona, volvió a ser agredido por un león. Tuvo que se hospitalizado por intoxicación en noviembre de 1986 tras incendiarse el Circo Ruso en Donostia.

El 29 de julio de 1990 sufrió en Lleida uno de los percances más graves de su carrera profesional. Tres leones y un tigre se le abalanzaron y le produjeron heridas en el cuello, tronco y extremidades, así como fractura de seis costillas. Estos mismos animales le atacaron de nuevo en noviembre de ese año y una vez más tuvo que pasar por el quirófano.

Denuncias y embargo Cristo, que había entrado en una crisis profesional a partir de este año, fue objeto de denuncia en 1991 y 1994. La primera vez por supuesto maltrato a sus animales y la segunda, a raíz de la utilización de un bebé y dos niños en un número con elefantes. Por esta última, el domador fue condenado al pago de una multa de dos millones de pesetas.

Su situación económica se agravó en 1998 con el embargo de su circo y especialmente, en octubre de 2000, cuando la Comunidad de Madrid le impuso una multa de más de 2.000 euros por infracción de la Ley de Protección de Animales.

Para pedir tanto la devolución de su circo como de sus fieras, en junio de 2001 realizó una huelga de hambre de seis días en Madrid.

A lo larga de su carrera recibió numerosos reconocimientos. Entre todos, destaca la Medalla de Oro que le concedió el Festival Internacional del Circo en 1982.

Ángel Cristo cobró notoriedad pública tras casarse con la actriz Bárbara Rey en 1980. Con ella tuvo dos hijos (Ángel y Sofía) y ambos se separaron de mutuo acuerdo en el verano de 1988. Desde entonces, la pareja protagonizó diversos incidentes en público de los que se hicieron eco los medios de comunicación. Después, el domador mantuvo diversas relaciones; entre ellas, con la bilbaina Berta Cilleruelo (1990) y la trapecista checa Angélica (desde 1992 a mediados de esa década).