Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa, juntos desde 2015, han disfrutado este fin de semana de unas vacaciones en Cala Jondal, una zona muy exclusiva de Ibiza. Esta es la primera vez que se ve a la pareja junta después de que la revista Semana publicara una información en la que se aseguraba que el escritor ya no vivía con Preysler en la urbanización madrileña de Puerta del Hierro.
Así, la pareja ha viajado hasta Ibiza para reunirse con los amigos y familiares de Gisela Rich, la multimillonaria que fue anfitriona de Isabel Preysler y Miguel Boyer durante varios veranos, y más tarde también de Vargas Llosa, y que falleció hace unos meses a causa de un cáncer.
De esta forma, el viaje ha servido para alejar del todo los rumores de separación que se cernían sobre la pareja a raíz de que Vargas Llosa fuera visto en su piso cercano a Puerta del Sol, lejos de Preysler. Sin embargo, fue ella misma la primera en desmentirlo en la revista ¡Hola!, donde aseguró que “no hay ningún tipo de distanciamiento, ni siquiera físico”.
Así, la explicación de que el escritor peruano estuviera en el piso de la familia Vargas Llosa está en que ese inmueble sirve de punto de encuentro para las visitas de sus hijos a España y que allí también se conserva la biblioteca del autor.
Además, el propio Mario Vargas Llosa salió en defensa de su relación con Isabel Preysler y declaró para Europa Press que están “bien”, lo que, según afirmó, se podrá comprobar en la boda del sobrino de la socialité, quien será su madrina.